El concesionario del parque recreativo de Selva, Felipe Jerez,
derribará el restaurante y construirá un edificio singular de nueva
planta diseñado por los mismos arquitectos que idearon el centro de
formación.
El pleno municipal aprobó en la noche del martes con los votos a
favor del PP, en contra del PSM y con la abstención de UM, la
revocación del proyecto presentado inicialmente por el nuevo
concesionario del parque y la aprobación de un nuevo proyecto que
incluye el derribo de los edificios existentes. Una decena de
vecinos que asistió al pleno trató sin éxito de convencer al
alcalde, Joan Rotger (PP), de que el proyecto presentado por Felipe
Jerez «incumple la normativa municipal», por lo que será
impugnado.
El alcalde mostró en el pleno un boceto del nuevo edificio
singular diseñado por los arquitectos Arnau y Jaume Gual, los
mismos que ya diseñaron el centro de formación del pueblo. No
obstante, el alcalde se negó a que Ultima Hora
fotografiara el boceto del edificio explicando que «es sólo una
primera idea porque no será exactamente así».
El dibujo mostraba un edificio moderno en el que predominan el
cristal y el hierro sobre la piedra, de una única planta
rectangular y cubierta plana. Precisamente el hecho de que la
cubierta sea plana y de que predominen el cristal y el hierro
fueron algunos de los puntos que más reprocharon los asistentes al
pleno que piden, además, que antes de aprobar el nuevo proyecto se
resuelvan las alegaciones presentadas a las normativa urbanística
de Selva, en tramitación, que califica el parque recreativo como
zona intensiva, lo que permitiría construir un 60 por ciento de la
zona verde municipal. El portavoz del PSM, Arnau Amer defendía esta
misma idea.
El alcalde Joan Rotger aseguró que el parque «nunca se
urbanizará porque es suelo verde municipal».
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