Los vecinos que tienen fincas próximas a la depuradora de Santa
Maria han presentado una denuncia ante la Guardia Civil por los
continuos vertidos de aguas sucias que se producen desde hace un
año en sus terrenos sin que el Ajuntament y el Ibasan (encargado
del mantenimiento de la depuradora) hayan tomado medidas para
atajar el problema.
Los vecinos afectados, Amalia Contreras y Joan Cabot, se quejan
de que «los vertidos además de poder producir problemas sanitarios
dificultan el acceso a los terrenos». Amalia Contreras está
preocupada por si se hubieran filtrado aguas sucias desde la
depuradora a un pozo de su propiedad.
El Institut Balear de Sanejament (Ibasan) realizó el pasado día
1 de junio, mediante la empresa constructora Amer i Hijos, unos
trabajos de limpieza y movimientos de tierra con la intención de
parar los vertidos. Según pudo comprobar ayer un redactor de
Ultima Hora todos los trabajos han sido inútiles y
las aguas se siguen filtrando por debajo de las paredes de la
laguna.
Un responsable de la empresa constructora explicó ayer que las
actuaciones previstas a partir de ahora consisten en crear una
pista de tierra junto a los terrenos de los vecinos y una barrera
de protección realizada con materiales especiales para acabar con
las filtraciones, para finalmente trasladar unos metros más allá la
laguna desde la que se producen las filtraciones.
Desde el Ajuntament el teniente de alcalde, Gabriel Canyelles,
ha manifestado: «Confiamos en que el Ibasan aporte soluciones
definitivas lo más rápidamente posible».
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