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El Ajuntament de Pollença está realizando las obras necesarias para conectar un nuevo pozo de agua potable de la zona de Can Seguí a la red municipal. El año pasado, un pozo de esta misma zona ya comenzó a suministrar agua a la red pero el incremento del caudal no ha sido suficiente.

El concejal de Medio Ambiente, Gabriel Cerdà, ha informado de que «el pozo suministrará agua a la red mientras se realizan los estudios de viabilidad en las zonas marcadas por el plan director de agua». El Ajuntament ha alcanzado un acuerdo con el propietario de este pozo por el cual venderá una media de 500 metros cúbicos diarios de agua al municipio.

Por otra parte, el Consistorio ha iniciado negociaciones con otro propietario de la misma zona para conectar un tercer pozo a la red municipal pero se encuentra a la espera de los informes técnicos para saber si la tubería podrá asumir todo el caudal.

Gabriel Cerdà espera que con la incorporación del nuevo pozo la calidad del agua en el Port mejore y no sea «tan salada». «El año pasado ya se notó ligeramente la incorporación del nuevo pozo y sólo durante el mes de agosto el agua estaba realmente salada», explica Cerdà.

Por otra parte, el Ajuntament de Pollença ha detectado que el pozo municipal de Can Puig tiene una baja calidad debido a la gran cantidad de perforaciones que se han hecho en la zona.