Un centenar de barcas, la mitad de ellas abandonadas, están
fondeadas en s'Oberta de s'Albufera, sin que ninguna institución
ejerza control sobre ellas. El lugar se ha convertido en los
últimos años en un cementerio de embarcaciones. Una veintena de
barcas abandonadas ocupan el fondo marino y otras tantas en muy mal
estado se reparten por la superficie. A ellas, se suman otras
cincuenta embarcaciones que se encuentran en perfecto estado y que
fondean habitualmente en el lugar.
Uno de los vecinos de la zona, Miquel Perelló, ha denunciado la
mala imagen que ofrece la zona y se queja de la «nula gestión» que
existe y de la «desorganización de aquellos que tienen las
competencias del canal».
La ordenación de la primera línea marítima es competencia de la
Demarcación de Costas, dependiente del Ministerio de Medio
Ambiente. Los vecinos se quejan de que «las instituciones se pasan
la pelota y hay barcas que hace más de diez años que están en el
fondo del canal». El director del vecino parque de s'Albufera de
Muro, Juan Salvador, ha explicado que «estamos al tanto del
problema pero no hemos hecho nada porque es responsabilidad de
Costas».
Salvador afirma que la dirección del parque ha hablado con
Demarcación de Costas pero no se ha alcanzado ningún acuerdo.
«Costas tendría que hacer una ordenación de los amarres pero eso
perjudicaría a los usuarios que tradicionalmente atracaban sus
barcas en el lugar», explica.
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