La construcción de grandes bloques de pisos o de pequeñas viviendas
adosadas dentro del núcleo urbano de Sencelles será imposible a
partir de ahora. La entrada en vigor de la nueva normativa
urbanística del término municipal prevé reducir de forma muy
importante la densidad de la construcción. De esta manera y
siguiendo los nuevos criterios, sólo se autorizarán aquellos
proyectos que contemplen un máximo de construcción de una vivienda
por cada 200 metros de solar. Precisamente la superficie mínima
para construir es de 200 metros cuadrados.
La norma será aún más restrictiva en el llogaret de Ruberts
donde se permitirá construir una única vivienda por parcela,
independientemente de cuál sea su extensión. En las afueras del
pueblo, se aplicará un sistema similar reduciendo las posibilidades
de edificar en las fincas en función de su grado de protección. Con
la nueva normativa se reduce de un 3 a un 2 por ciento el máximo
edificatorio en las viviendas rústicas comunes donde se exige un
mínimo de dos quarterades para edificar. En cambio, en las zonas de
especial protección sólo se permitirá construir un 1 por ciento de
la superficie de la finca.
Por otra parte, el Ajuntament está realizando un plan de
embellecimiento en la Plaça Espanya aprovechando las obras de
alcantarillado y las aceras que se están realizando en las calles
próximas. La empresa constructora ya ha comenzado a desmantelar la
acera en la zona de la rectoría para soterrar todo el cableado
eléctrico. A continuación, se retirará la zona de viandantes que
quedará empedrada.
La reforma implicará la supresión de las plazas de aparcamiento
en toda esta zona. Sólo se conservarán algunas plazas en la parte
de la Casa de la Vila. El alcalde Aloy ha explicado que se
mantendrá el tráfico rodado en el centro de la plaza al menos hasta
disponer de un aparcamiento y de una salida hacia la parte
posterior del pueblo a través de los callejones.
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