Pere Sampol dijo a los representantes de Suliar que la solución al
cierre de esta empresa no está en manos del Govern, pero se
comprometió a remitir las posibles alternativas al Ajuntament de
Sóller y a dar un impulso a la creación de un polígono de servicios
en Sóller siempre que la Administración municipal lo considere
adecuado. Los socios de Suliar explicaron a Sampol que el cierre ha
sido una medida «injusta».
La reunión del consejo de administración de Suliar con el
vicepresidente del Govern es la primera de una cargada agenda que
llevará a los directivos de la cooperativa a entrevistarse con el
conseller de Treball, Eberhard Grooske; la presidenta del Consell,
Maria Antònia Munar, y el president del Govern, Francesc Antich. El
alcalde de Sóller precintó Suliar el pasado miércoles en
cumplimiento de un requerimiento judicial. Esta orden es
consecuencia de la aceptación de la denuncia presentada por seis
vecinos de sa Roca Rotja contra la empresa ubicada en suelo
rústico. El cierre afecta a ocho empleos directos y 200
indirectos.
Miquel Gual, delegado del Consorci per al Desenvolupament
Industrial, comentó que la Administración autonómica puede
facilitar a los empresarios de Sóller poder acceder a suelo
industrial a un precio razonable porque el Govern de les Illes
Balears «no especula» y a través de una empresa pública puede
adquirir los terrenos y dotarlos de infraestructuras, vendiéndolos
luego por el precio de coste. La normativa de Sóller prevé crear el
polígono en Son Puça, pero esta opción fue muy protestada hace unos
meses por algunos grupos políticos y ecologistas. Suliar ya ha
pedido permiso a la Delegación del Gobierno para realizar una
manifestación.
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