Jaume Guiscafré, frente a los planos del nuevo planeamiento urbanístico de Artà.

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El Consistorio de Artà aprobó anoche el anteproyecto del nuevo planeamiento urbanístico municipal pero tuvo que dejar fuera la parcela mínima prevista para el suelo rústico. El avance de las Normas Subsidiarias recibió el apoyo del equipo de gobierno Independents d'Artà-PSOE y del edil de EU-Els Verds, Julen Adrián. Sin embargo, el voto del PSOE estuvo condicionado por la previa supresión de la parcela mínima de 30.000 m2. «Estamos de acuerdo con el 99%, pero no con la parcela de 30.000 m2», manifestó el portavoz socialista, Josep Silva.

Al debatir la problemática parcela, los portavoces del PP y UM, Jaume Sureda y Apol.lònia Genovard, respectivamente, suscribieron las tesis del PSOE y defendieron que en Artà es suficiente con 15.000 m2, como en el resto de Mallorca. El alcalde, Monserrat Santandreu, defendió la necesidad de preservar el municipio, de ahí la propuesta de exigir algo más de cuatro quarterades para poder edificar en fora vila.

En la votación de la parcela mínima, EU-EV volvió a ofrecer su apoyo a los cinco ediles independientes y pese a que días atrás Jeroni Ginard había expresado sus dudas finalmente respetó la disciplina de voto de su grupo. Los seis votos favorables fueron anulados por los seis negativos del PSOE (3), PP (2, faltó un edil) y UM (1). Consultada la secretaria, ésta indicó que el voto de calidad del alcalde no era posible en este tema, quedando la parcela mínima de 30.000 m2 descartada.

El delegado de Urbanismo, el independiente Jaume Guiscafré, anunció su inminente dimisión, si bien aseguró que el resultado de la votación de ayer no ha influido y argumentó motivos profesionales para renunciar al acta de concejal.