TW
0
T.GARCIES/M.C El equipo de gobierno popular de Sencelles ha decidido renunciar a la subvención otorgada por el Govern para las obras de reforma y empedrado de la plaza de la Iglesia, incluidas en el Plan Mirall. El factor económico y los problemas de tráfico que hubieran ocasionada las obras y el cierre de la plaza, son los principales motivos que han llevado al gobierno senceller a tomar esta decisión.

Aunque la Sala sólo tenía que aportar el 35% de los 57 millones de pesetas en los que estaban presupuestadas las obras, se ha decidido renunciar a éstas debido a los problemas de tráfico que se registran en el centro del pueblo, donde está ubicada la plaza, y la falta de aparcamientos en el lugar. Por ello, ahora la Sala está intentando adquirir terrenos en el centro para convertirlos en parking.

Además, según el alcalde, Josep Aloy, «no se podría cerrar la plaza totalmente, ya que con el cierre se hubieran dejado una serie de calles sin salida». Aloy manifestó que «a la hora de tomar la decisión también ha pesado el factor económico, ya que los recursos municipales son limitados». En este sentido, desde el Ajuntament se prefiere dar prioridad a la instalación de la red de alcantarillado.