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CATALINA MESTRE «Todos los campos de golf tendrían que regar con agua depurada». Esta fue la opinión unánime de todos los invitados de la tertulia que dirige y modera Magdalena Parera.

Los invitados al debate fueron Margalida Rosselló, consellera de Medi Ambient del Govern de les Illes Balears; Miquel Àngel Borràs, responsable de Medio Ambiente del Consell de Mallorca; Francesc Acuñas, delegado de Medio Ambiente del Ajuntament de Manacor; Salvador Vadell, delegado de Turismo del Ajuntament de Manacor; Pedro Cañellas, presidente de la Federación Hotelera Balear; Miquel Galmés, delegado de Turismo del Ajuntament de Sant Llorenç; Miquel Àngel March, portavoz del GOB, Miquel Lladó, presidente de la Cambra de Comerç; Josep Aloy, alcalde de Sencelles y directivo de la Federación Balear de Golf, y Romeo Sala, propietario de Pula Golf.

Margalida Rosselló consideró que no se puede hacer demagogia sobre el tema del agua: «La realidad es muy clara, hay un problema de gran trascendencia y sí es cierto que algunos campos utilizan aguas depuradas, pero otros no. Sin embargo, cada vez se solicitan más concesiones para regar con agua depurada». Miquel Lladó dijo: «Se debería exigir que todos utilizaran agua depurada y así el agua potable que dejara de sacarse para regar destinaría a otros usos».

Rosselló: «Un golf no es rentable por sí solo»
La consellera de Medi Ambient, Margalida Rosselló, considera que «un campo de golf sólo es rentable cuando hay una urbanización al lado. En este sentido, y teniendo en cuenta la presión urbanística que hay, considero que no tienen que proyectarse más campos ya que suponen la urbanización del suelo rústico, además de un elevado consumo de agua».