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Los amantes de los productos naturales autóctonos pueden acudir este fin de semana a Lluc para contemplar y, por qué no, catar, las excelentes hierbas aromáticas y medicinales de la tierra. Ayer se inauguró oficialmente la VII Mostra de la Serra de Tramuntana, que cobra entidad propia por vez primera.

La muestra, organizada por el jardín botánico de Lluc, se ha celebrado en los últimos seis años coincidiendo con la fiesta de la Diada, pero el éxito de ediciones anteriores ha animado a su impulsor, el padre Macià Ripoll, a convocar una jornada autónoma.

Desde ayer y durante todo el día de hoy las personas que acudan al santuario pueden disfrutar de una muestra única que recoge los productos autóctonos procedentes de toda la comarca.

Ayer permanecían abiertos ocho puestos, en su mayor parte expositores de especias y hierbas medicinales.
La principal novedad de esta edición radica en que por primera vez algunos de los productos que se exponen también están a la venta.
Los más lanzados tienen además la oportunidad de probar de forma gratuita las infusiones realizadas por el padre Ripoll valiéndose de las plantas aromáticas que cultiva en su jardín.