Sóller se despidió ayer de la XX edición de la Mostra Internacional
Folklòrica, caracterizada este año por la gran calidad de las
danzas. Los actos de clausura de Sa Mostra comenzaron a las 19
horas aproximadamente con el baile de todos los grupos
participantes. Miles de personas se congregaron en la Plaça de la
Constitució para despedir a los más de 200 participantes de
diferentes continentes.
Al acto asistieron el vicepresident del Govern, Pere Sampol; la
delegada del Gobierno, Catalina Cirer; el conseller de Interior,
Josep Maria Costa; el de Agricultura, Mateu Morro; la
vicepresidenta del Consell de Mallorca, Maria Antònia Vadell; el
vicepresidente de sa Nostra, Bartomeu Nadal; la ministra de Cultura
de la República Saharaui, Miriam Salek, y los alcaldes de Sóller y
Fornalutx. Se notó, sin embargo, la ausencia de los jefes de los
sectores del Puig Major y de la estación naval, habituales
colaboradores en estos actos culturales. Antes de dar comienzo los
bailes, Maria Antònia Vadell, dirigió unas palabras a los
participantes. «Por una semana, Sóller se ha convertido en la
ciudad de la cultura y el folclore. Sa Mostra es un importante
enlace de las culturas y costumbres de otros pueblos», indicó.
El vicepresidente del Govern, Pere Sampol, felicitó a los
organizadores por los 20 años de Sa Mostra y también quiso
agradecer a los diferentes grupos la exhibición de su arte. «Espero
que se pueda celebrar durante muchos años más», apuntó. Acto
seguido, los grupos interpretaron las últimas danzas del evento.
Destacaron los bailes de los grupos de Costa de Ivorí y de Haití y
la belleza de la danza del grupo de la República de Buriatia. Aires
Sollerics puso el punto y final a la XX edición de la Mostra
Internacional Folklòrica.
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