La promotora alemana DWI y el Ajuntament de Campos se han unido
para llevar ante los tribunales al Govern de les Illes Balears por
haber paralizado la construcción del complejo turístico del campo
de polo en el municipio. La denuncia se basará en el hecho de que
el Govern modificó las Directrices de Ordenación Territorial (DOT),
puesto que el anterior gobierno autonómico, gobernado por el PP,
había dado el visto bueno para que el complejo pudiera construirse
haciendo una excepción en las DOT.
El recurso contencioso administrativo fue presentado ante los
tribunales el día 30 de diciembre, último día de que gozaban para
presentar las legaciones. El representante de la promotora DWI,
Jaume Sitjar, ha manifestado que «el Govern modificó las
Directrices de Ordenación Territorial sin informar a los afectados
y sin hacer un exposición pública para poder presentar alegaciones.
Además, el proyecto estaba ya consolidado por una ley del PP que
permitía construir el campo de polo». «Por esta razón, consideramos
que podemos impugnar», agregó.
En la misma línea se ha manifestado el alcalde de Campos, Andreu
Prohens: «Nosotros tenemos un informe que demuestra que perdemos
4.000 millones de pesetas, y vamos a presentarlo ante los
tribunales. Esperamos que se den cuenta de las pérdidas económicas
que la paralización ha supuesto para nosotros y que apliquen
justicia». El concejal de la oposición Joan Juan Pons (PSM)
califica la actitud del Ajuntament de «equivocada y negativa para
el prestigio del Consistorio, puesto que una entidad como el
Ajuntament no puede unirse con una promotora para llevar al Govern
a juicio».
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