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INÉS BONET El edificio de la estación del tren de Lloseta, que lleva muchos años cerrado debido al mal estado en que se encuentra, será reabierto una vez sea rehabilitado para poder ofrecer un mejor servicio a sus usuarios. El alcalde, Bernat Coll, visitó recientemente junto con el nuevo gerente de Serveis Ferroviaris de Mallorca , José Antonio Santos, la estación de Lloseta. Después de ver in situ el estado de abandono de las instalaciones, el gerente ha comunicado que la primera actuación que se llevará a cabo es la rehabilitación del edificio que dispone la estación y que lleva muchos años cerrado por motivos de seguridad. «Las tejas han cedido», indicó el alcalde.

Una vez finalizada esta reforma, que se iniciará lo más pronto posible, se abrirán las puertas del edificio desde el cual se ofrecerán servicios complementarios a los usuarios. Asimismo, se estudia la posibilidad de contratar a alguien para que se haga cargo del mantenimiento y control del edificio. Por otro lado, el alcalde aprovechó la visita del gerente para pedir que se derribe el único puente de la estación. «Su utilidad es prácticamente nula, ya que se encuentra muy lejos del arcén. Además, el mal estado en que se encuentra puede resultar peligroso para los transeúntes», comentó el batle.