Miquel Riera (ALM), alcalde de Manacor, y Maria Antònia Vadell
(PSM), portavoz del equipo de gobierno, explicaron ayer, en la
primera rueda de prensa de la actual legislatura, que la situación
económica del Ajuntament es alarmante. «No queremos dar una imagen
negativa, ni criticar al anterior equipo de gobierno. Pero sí
queremos aclarar a la opinión pública cuál es la situación con la
que nos hemos encontrado», afirmó Maria Antònia Vadell. De hecho,
el nuevo gobierno municipal se ha planteado aprobar el presupuesto
del año 2000 antes de concluir 1999.
Los mayores agujeros económicos se han detectado en el
departamento de Cultura, y en el área de Agricultura, Ferias y
Mercados. «Tendremos que modificar el presupuesto y adaptarlo, con
el fin de hacer frente a la situación. No podremos iniciar todos
los proyectos que teníamos pensados hasta el próximo año»,
indicaron.
El nuevo equipo de gobierno tendrá que hacer frente, además, a
dos graves problemas. Uno de ellos se refiere a la ejecución de la
sentencia de la Plaça de ses Verdures. «Los técnicos están
estudiado detalladamente las posibles soluciones, por lo que
pedimos un poco de paciencia al querellante», explicaron.
El otro asunto pendiente es la búsqueda de una solución para que
se pueda construir un nuevo centro escolar en s'Illot. «Una de
nuestras prioridades era activar la construcción del nuevo centro
escolar de s'Illot. La sorpresa es que desde la Conselleria
d'Educació i Cultura del Govern se nos ha informado que faltan 800
metros cuadrados para que se pueda construir la escuela», explicó
Vadell. Y lo auténticamente sorprendente es que los terrenos en los
que se pretende construir la nueva escuela están afectados por la
moratoria del Consell Insular de Mallorca (CIM).
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