El Pla de Mobilitat de Cort pretende hacer aceras más anchas y conectadas para beneficiar a los viandantes. | R.L.

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El Ajuntament de Palma potenciará la red de calles y espacios para viandantes en el municipio con 15 actuaciones consideradas preferentes que supondrán la peatonalización y ampliación de 30,8 kilómetros de calles y aceras, según se recoge en el Pla de Mobilitat Urbano Sostenible. El PMUS es el documento marco que utilizará el Consistorio para definir la movilidad de Palma hasta el año 2030 y nace con el objetivo, según se destacó durante su presentación, de reducir las emisiones contaminantes de los vehículos y «conseguir un municipio más amable y sostenible».

Este documento, que actualmente está en periodo de alegaciones y será aprobado definitivamente en los próximos meses, incluye una serie de medidas como la instauración de una zona de bajas emisiones en el centro de la ciudad o mejorar el transporte público. Entre ellas, una de la más importantes es la de «reequilibrar la distribución del espacio de la red viaria» dado que, según sus datos la movilidad a pie, «es el principal modo» de desplazamiento en Palma.

Para ello, y reconociendo que muchos de los itinerarios para viandantes «todavía no tienen un nivel de calidad suficiente», se propone actuar en la configuración de una red transversal, al estilo de una tela de araña, sobre el municipio con el objetivo de que toda la población quede a menos de 350 metros, cinco minutos caminando, «de un eje de calidad que le conecte con el resto de la ciudad».

La red básica para viandantes que propone el PMUS se articula a través de unos requisitos básicos entre los que destaca unas aceras de 3 metros útiles para las vías ya existentes y de 5 metros de ancho para las nuevas urbanizaciones, la posibilidad de que la vía se compartida por un carril bici siempre que el tránsito sea inferior a las 100 personas por hora y la necesidad de que conecten zonas verdes, deportivas y escolares.

El plan recuerda que el Ajuntament ya ha actuado en la peatonalización de la calle Nuredduna y en la ampliación de las aceras de la calle Temple y Ramon Llull, en el casco antiguo, y en Rafael Rodríguez Méndez, junto a la plaza Madrid, pero establece como prioritarias otras actuaciones, las citadas 15, para conseguir el objetivo buscado.