El alcalde de Palma, José Hila, durante su visita a una de las calles renovadas por el plan de Barrios.

TW
0

El Ayuntamiento de Palma ha invertido 1,5 millones de euros para renovar el espacio público de las calles Barrera, Roselló, Borguny y Villalonga, dotándolas de nuevas infraestructuras y pavimento, más arbolado y alumbrado. En concreto, se han invertido 1.250.000 euros en mejoras de infraestructuras y un total de 258.041 euros en mejoras de las cañerías y al alcantarillado a través de EMAYA. Esta intervención, que ha permitido renovar en diferentes fases 11.000 m² de calles, se integra en el denominado Plan de barrios y ha permitido mejorar la accesibilidad, el alumbrado y dotar de más arbolado este espacio para que sea un lugar «más amable y más sostenible», ha informado el consistorio este viernes en una nota.

Las obras se han realizado en diferentes fases. Se han llevado a cabo mejoras en la intersección entre la calle Barrera y la calle Rosselló, como colocar bancos y realizar una plataforma especial para los contenedores de EMAYA; se han renovado 6.451 m² y se ha soterrado el cableado eléctrico del cruce de calles entre Despuig y Villalonga, además de que se han renovado 688 metros de cañerías, 387 metros de alcantarillado y 301 metros de agua potable.

También se han renovado y ampliado 5.000 metros cuadrados de acera y todo el asfaltado de la calle Barrera hasta Joan Crespí, se han plantado 11 árboles nuevos: seis en la calle Villalonga y cinco en la plaza situada entre Borguny y Comte de Barcelona y se ha renovado todo el alumbrado con 10 farolas en la plaza entre Comte de Barcelona y el tramo de la calle Villalonga entre Joan Crespí y Barrera.