MADRID, 26/05/2022.- La ministra de Igualdad, Irene Montero, interviene este jueves en el pleno del Congreso, donde el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha dado cuenta del espionaje con Pegasus sufrido por él mismo y por líderes independentistas, un caso que había abierto una profunda brecha con sus socios parlamentarios. EFE/ Miguel Osés | M. À. Cañellas

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La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha celebrado este jueves que, con la aprobación en el Congreso de la ley del solo sí es sí, el movimiento feminista «vuelve a hacer historia» y se ha mostrado convencida de que será de los derechos más importantes «que podamos dejar a nuestras hijas en el presente y en el futuro». De esta forma ha concluido Montero su intervención para cerrar el debate parlamentario del dictamen de la ley de garantía integral de la libertad sexual al que la mayoría de la cámara baja, a falta de la votación final, ha mostrado su respaldo con lo que la norma continuará su tramitación parlamentaria en el Senado.

«Hoy es un día muy importante para las mujeres de nuestro país, el 'solo sí es sí, el 'hermana yo sí te creo' por fin se convierte en una ley; la libertad sexual, por fin, va a ser un derecho en nuestro país y vamos a cambiar la violencia por la libertad y el miedo por el deseo. España desde hoy es un país más seguro para todas las mujeres» ha sentenciado la ministra. Ha recordado en su discurso a víctimas de la violencia sexual como las niñas de Alcasser, Nevenka Fernández, Nagore Laffage o la de la manada en los sanfermines de 2016, tras lo que ha insistido en que el movimiento feminista «encuentra hoy la mejor respuesta del Gobierno de coalición y de las Cortes» porque las instituciones y el Estado dicen «a una solo sí es sí, hermana yo sí te creo».

Montero ha agradecido a todos los grupos de la Cámara que van a apoyar el texto final y que han tenido un debate «honesto y riguroso», pero ha lamentado que el PSOE en su intervención de este jueves a través de la diputada Laura Berja «no haya reflejado el enorme trabajo» realizado para sacar adelante la norma. Y es que Berja, que ha intervenido justo ante que la ministra, ha criticado que la ley finalmente excluya el castigo al proxenetismo y que tuviera que retirar su enmienda dirigida al abolicionismo de la prostitución para que pudiera salir adelante con los apoyos de los socios del Gobierno en el Congreso. La ministra ha advertido de que la libertad sexual de las mujeres será una realidad a pesar del «ruido reaccionario» de la extrema derecha, de los agresores y de la «justicia patriarcal»: «Ustedes hacen mucho ruido pero les demostramos que las feministas somos más», ha subrayado.

«El movimiento feminista vuelve a hacer historia, se lo debíamos a cada una de las víctimas, nos lo debíamos a nosotras mismas y, probablemente, sea uno de los derechos más importantes que podamos dejar a nuestras hijas en el presente y en el futuro, solo sí es sí, que viva la lucha de las mujeres», ha afirmado Montero. En su intervención, ha recordado que la ley pone el consentimiento sexual en el centro, protege y garantiza los derechos de las víctimas, apuesta por la prevención y erradicación de la violencia a través de la educación llenando «de feminismo las aulas de nuestro país». Montero ha enumerado varios de los puntos de la ley que reconoce las violencias sexuales como machistas, castigando el acoso callejero, la mutilación, el matrimonio forzado, la violencia digital, y, por primera vez, reconoce la explotación sexual y la trata también como formas de violencia contra la mujer, al tiempo que considera la sumisión química como una forma de agresión sexual.