Vista general del hemiciclo durante la formación de la mesa de edad, en la sesión de constitución de la Cámara Baja de la X Legislatura. | Joana Nicolau

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Con la constitución de las Cortes Generales ha quedado inaugurada hoy la décima legislatura, en la que Amaiur podría tener grupo parlamentario propio en el Congreso, después de quince años de ausencia de la izquierda abertzale.

La constitución de las dos cámaras ha transcurrido con absoluta normalidad y dentro de lo previsto, con la elección de Jesús Posada como nuevo presidente del Congreso, con el respaldo de 202 diputados (PP y CiU), y de Pío García Escudero al frente del Senado, con 180 votos a favor.

Posada y García Escudero serán recibidos esta misma tarde en el palacio de la Zarzuela por el rey, antes de que el monarca empiece mañana la ronda de consultas con los representantes de los partidos políticos para proponer candidato a la investidura como presidente del Gobierno, los días 19 y 20 de este mes.

Sólo el diputado de IU por Asturias, Gaspar Llamazares, se ha salido del guión, al interrumpir la sesión de constitución del Congreso desde su escaño para protestar a viva voz por la exclusión de su grupo, la tercera fuerza política en número de votos, de la Mesa de la Cámara, que se han repartido PP, PSOE y CiU.

También ha sorprendido la ausencia del diputado de Amaiur por Navarra, José Ramón Sabino Cuadra, quien ha alegado motivos personales, en una maniobra que podría facilitar la formación de grupo parlamentario propio a la izquierda abertzale.

Amaiur obtuvo siete diputados en los comicios del 20N, aunque, según el reglamento del Congreso, no podría constituir grupo parlamentario porque no consiguió el 15 por ciento de los votos en la circunscripción de Navarra.

En una situación parecida se encuentra UPyD, cuya líder, Rosa Díez, ha considerado que sería «terrible» que el PP no facilitara a su partido tener grupo propio porque ello impediría el desarrollo de su tarea de representación política, que ha obtenido el voto de más de 1,14 millones de ciudadanos.

Las fórmulas para acatar la Constitución han sido hoy más variadas que en otras ocasiones.

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Así, los seis diputados de Amaiur, los cinco del PNV, los tres de ERC y varios de IU han tomado posesión de su escaño prometiendo acatar la Carta Magna «por imperativo legal», frase que muchos de ellos han pronunciado en el hemiciclo en castellano, euskera y catalán, según su lugar de procedencia.

Incluso el líder de IU, Cayo Lara, ha estrenado en el Congreso una novedosa fórmula y a su promesa ha añadido: «Sin renunciar a mis convicciones republicanas».

En su primer discurso como nuevo presidente, Jesús Posada se ha puesto a disposición de todos los diputados «sin excepción», después de apelar al diálogo y al consenso que fue posible en un momento como la Transición para que los partidos busquen soluciones compartidas a los «graves problemas» con los que se inicia la legislatura.

«Son momentos difíciles; hay graves problemas que debemos intentar resolver y la ciudadanía espera de nosotros esfuerzos generosos para afrontarlos», ha subrayado en una breve intervención al término de la sesión de constitución de la Cámara Baja.

También se ha comprometido a facilitar el diálogo entre los grupos el nuevo presidente del Senado, Pío García Escudero, sobre todo para que se haga efectiva en esta legislatura la reforma de la Cámara Alta.

García Escudero ha defendido rotundamente al Senado, una institución en la que lleva más de quince años, en la que cree y que, según ha dicho, ha cumplido «con dignidad» y «fielmente» las labores que le encomienda la Constitución.

Recién constituidas las Cortes, la primera reunión que ha tenido el líder del PP y futuro presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha sido con el dirigente de CIU Josep Antoni Duran Lleida, a quien le ha comunicado que no atenderá de momento la petición de pacto fiscal para Cataluña.

Han asistido a la sesión constitutiva del Congreso el presidente del Gobierno en funciones, José Luis Rodríguez Zapatero, y buena parte de sus ministros.

A la salida, Zapatero ha dicho que le parece «bien» y «correcto» el llamamiento al diálogo y al consenso efectuado por Posada.