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Los 'indignados' que este miércoles han acampado ante el Parlamento catalán han defendido que la mayoría se ha comportado de forma pacífica frente a una minoría, a la que han atribuido los altercados como insultos y lanzamiento de agua y pintura, y ha definido el bloqueo como una «desobediencia activa no violenta, pacífica pero determinada».

En un comunicado, los 'indignados' han asegurado que el «gran grueso de la gente ha practicado una estrategia de resistencia activa no violenta», y ha lamentado que más de 30 manifestantes han resultado heridos.

Este manifiesto será leído a las 20 horas en el Arc de Triomf de Barcelona, cerca del recinto ahora 'fortificado' de la Ciutadella, que alberga el Parlamento catalán.

Los 'indignados' han considerado «inadmisible» que se les pretenda culpar de todas las muestras de descontento social que se han congregado este miércoles ante la Ciutadella, ya que se abanderan de su naturaleza pacífica.

De hecho, han subrayado que gracias al pasillo creado por ellos en el centro de la protesta, los diputados han podido acceder al Parlamento, a la vez que la tensión ha sido contenida «de forma inteligente y serena por las miles de personas participantes».

Por otra parte, han asegurado que la actuación policial a las 6.45 horas de esta mañana «no se ha limitado a disolver únicamente a los concentrados», sino que ha traspasado las líneas rojas de mínimos derechos sociales porque se ha disuelto a las personas con el uso de la fuerza, la violencia y la coacción cuando no había medios de comunicación y no podía quedar constancia.

Han asegurado que los agentes, sin la identificación visible, obligatoria, han comenzado a realizar «detenciones con el objetivo de intimidar y confiscar teléfonos móviles y cámaras fotográficas y de vídeo», lo que ha contribuido a incrementar la tensión entre los acampados.

A pesar de ello, el manifiesto asegura que la mayoría de ellos ha estado intentando calmar los ánimos y que, en la asamblea de más tarde, se ha lamentado y condenado los «minoritarios actos violentos que se han producido».

En ese momento los diputados han comenzado a acceder al recinto, cuando se han producido los máximos altercados, y «muchas personas intentaron que la determinación de la protesta siguiera siendo compatible con la acción pacífica» dando lugar a una tensión mayoritariamente no-violenta y autocontrolada, han defendido.

Primeras detenciones

Los Mossos d'Esquadra han realizado las primeras detenciones por el bloqueo de los indignados al parque de la Ciutadella para boicotear la tramitación de los presupuestos y la llegada de diputados al hemiciclo.

Según ha constatado Europa Press, tras las primeras cargas de la policía en la calle Wellington, donde está el acceso principal del Zoo, los Mossos se han llevado a varios indignados que estaban apostados en las vías del tramBesós, para impedir la salida de los diputados.

La policía autonómica ha realizado la última carga en los dos flancos de indignados reunidos a cada lado de la salida de Wellington, para crear un cordón policial y dar paso a los trabajadores del Parlamento catalán, que han sido abucheados a su salida por los manifestantes.

Protesta en Sant Jaume

Los «indignados» que bloqueaban los accesos al Parlamento catalán han abandonado poco después de las 18:30 horas los alrededores del parque de la Ciutadella para continuar su protesta en la plaza de Sant Jaume, frente al Palau de la Generalitat, hacia la que se han dirigido en manifestación.

En un primer momento una veintena de jóvenes ha decidido permanecer en el acceso al zoo de la calle Wellington para esperar a los diputados y abuchearlos de nuevo a la salida del Parlament, pero al cabo de una media hora han decidido deponer su actitud y dirigirse también a la plaza de Sant Jaume

Aunque en una asamblea celebrada esta mañana se había aprobado por parte de los «indignados» abandonar el parque de la Ciutadella no ha sido hasta esta tarde cuando en otra asamblea improvisada se ha tomado la decisión de forma definitiva por parte de los jóvenes concentrados en la calle Wellington.

No obstante, en esta segunda asamblea ha habido numerosas voces a favor de esperar a los diputados para abuchearlos de nuevo, aunque finalmente se han impuesto los partidarios de continuar la protesta en la plaza Sant Jaume, frente al Palau de la Generalitat.

Tras la marcha de los «indignados», los mossos han rebajado su presencia en la zona, aunque todavía mantienen parte del operativo desplegado a primera hora de hoy para impedir que a primera hora de hoy los «indignados» llegarán hasta el Parlament.

En la asamblea celebrada tras los incidentes de hoy, unas 500 personas han ratificado la apuesta por la vía pacífica del movimiento 15-M y han criticado a los que esta mañana han atacado a varios diputados.