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El arzobispo castrense Juan del Río y el obispo de Las Palmas Francisco Cases oficiaron ayer el funeral del cabo Cristo Ancor Cabello Santana, fallecido el pasado miércoles en un atentado en Afganistán en la base militar General Alemán Ramírez, en el barrio de La Isleta de Las Palmas de Gran Canaria. Tras su celebración, los restos mortales fueron trasladados al Panteón Militar de San Lázaro. El soldado fallecido recibió a título póstumo la Cruz del Mérito Militar, que reconoce la labor de los soldados en zonas de conflicto.

La ceremonia de despedida al cabo Cristo Ancor Cabello Santana estuvo presidida por el Príncipe de Asturias, así como el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero; el presidente del Ejecutivo de las Islas Canarias, Paulino Rivero; la ministra de Defensa, Carme Chacón y autoridades militares y civiles. El acto estuvo cargado de emoción, debido en gran parte al respetuoso silencio que imperó en la ceremonia.

Entre los asistentes se encontraban familiares y amigos del soldado fallecido el pasado miércoles en un atentado en Afganistán, que recibieron la Cruz del Mérito Militar concedida a Cristo Ancor a título póstumo y por la que se reconoce su labor en zonas de conflicto. El Príncipe de Asturias saludó a los familiares y intercambió unas palabras con la madre y la abuela del soldado, a quien trasladó sus condolencias.

Compañeros
El féretro fue llevado por ocho de sus compañeros hasta el túmulo central del lugar, donde se ofició la misa fúnebre. El arzobispo Juan del Río Martín, que ofició la eucaristía, destacó el trabajo del cabo en «su corta vida militar», ya que había sido condecorado con la medalla de Naciones Unidas por su participación en la misión del Líbano.

Durante la homilía, el arzobispo incidió en que el cabo Cristo Ancor Cabello Santana «ha dado la vida por los nobles ideales de la milicia» al igual que otros de sus compañeros, lo que ha supuesto que España se convierta en un «país que sabe mirar de frente y que no esquiva la mirada ante los graves problemas internacionales donde las naciones libres se juegan el futuro de su seguridad e independencia».