Manuel Chaves y Francisco Camps, ayer, en Madrid. g Foto: J.C.CÁRDENAS/EFE

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AGENCIAS-MADRID/BRUSELAS El ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, insistió ayer en que la Seguridad Social tendrá superávit este año y afirmó que los pensionistas pueden estar seguros, este año, en 2010 y hasta 2025.

Así respondió el ministro en el Pleno del Congreso a la pregunta del diputado popular Tomás Burgos sobre en qué datos se basa para descalificar las previsiones hechas por el gobernador del Banco de España, Miguel Àngel Fernández Ordóñez, sobre la Seguridad Social.

Corbacho dijo que respeta las informaciones que vengan de cualquier institución y máxime si vienen del Banco de España, pero que las previsiones de la Seguridad Social son de superávit.

El ministro acusó al PP de crear alarmismo e incertidumbre y de «dar por amortizados cuatro millones de parados», cuando «todavía no hemos llegado» y que parece tener «inquietud y prisa» por llegar, para validar el principio «de cuanto peor mejor».

Burgos aseguró que el Gobierno está dando un «espectáculo» y ha llevado la intranquilidad a millones de españoles, y acusó a Corbacho de hablar de necesidad de rigor y de previsiones «creíbles» cuando dijo que la crisis se resolvería en dos meses, que no se alcanzaría la cifra de cuatro millones de parados o que en este trimestre se crearía empleo. «Con estos antecedentes», prosiguió, «desacredita usted y en tono amenazante», cuando de un ministro «se esperan resultados y no cazas de brujas».

Por su parte, el Banco de España plantea ampliar el cálculo para la pensión de jubilación a toda la vida laboral y sugiere analizar que las pensiones puedan actualizarse de acuerdo al IPC real y no al previsto, con lo que podrían revisarse también a la baja.

Así se desprende del informe «La reforma del sistema de pensiones en España» elaborado por el Servicio de Estudios del Banco de España, en el que se sugiere abrir un debate sobre varias medidas para reducir el gasto en las pensiones.

Poder adquisitivo
La entidad supervisora sugiere debatir sobre una revisión automática de las pensiones en el caso de que el IPC real fuera inferior al estimado, así como tomar un índice de precios de referencia, elaborado a partir de una cesta representativa, que se ajustara «mejor al poder adquisitivo de los pensionistas».

Por otra parte, la Comisión Europea considera que España es uno de los países de la UE donde más aumentará el gasto público, especialmente en pensiones, de aquí a 2060 debido al impacto del envejecimiento de la población. Bruselas apuesta por reformas en el sistema de pensiones y en el sanitario para contrarrestar esta tendencia y garantizar la sostenibilidad de las finanzas públicas.

Estas conclusiones aparecen en el borrador de un informe sobre pensiones que el Ejecutivo comunitario tenía previsto haber publicado el martes pero que finalmente retrasó a la semana que viene sin dar explicaciones. El retraso coincide con la polémica en España entre el Gobierno y el gobernador del Banco de España, Miguel Àngel Fernández Ordoñez, sobre la sostenibilidad del sistema de pensiones.