El precio de la cesta de la compra es algo que influye directamente en el bienestar de las familias españolas.

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EFE-MADRID
La fuerte desaceleración de la economía española se refleja en las cuentas del Estado que en julio, por segundo mes consecutivo, registraron un déficit de 9.965 millones de euros, el 0'89% del PIB, debido, principalmente, a la crisis del sector inmobiliario.

Se trata del segundo déficit que registran las cuentas del Estado, que en junio incurrieron en su primer saldo negativo desde el mismo mes de 2005.
El ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, ha reconocido que será difícil cumplir con el objetivo de lograr un superávit en 2008 del 1'2 por ciento del PIB para el conjunto de las Administraciones Públicas (Estado, Comunidades Autónomas, Ayuntamientos y Seguridad Social).

«Pronto»
Según Solbes, aunque todavía es «un poco pronto» para llegar a conclusiones finales, esta situación genera «alguna probabilidad mayor de que el déficit total a fin de año no corresponda al superávit previsto», ya que los datos hasta ahora van «en dirección de distanciarse» de lo presupuestado.

Sin embargo, la crisis no está afectando de la misma manera a las cuentas de la Seguridad Social que, según datos del Ministerio de Trabajo, en los siete primeros meses del año registraron un superávit de 12.918'56 millones, el 0'64 por ciento más que en el mismo periodo de 2007.

Por el contrario, según los datos difundidos ayer por el Ministerio de Economía y Hacienda, el déficit acumulado por el Estado hasta julio es resultado de una caída de los ingresos del 10'1 por ciento, hasta los 77.965 millones de euros, y de un aumento de los gastos del 11'1 por ciento, hasta 87.930 millones.

Así, el déficit acumulado hasta julio contrasta con el superávit de 7.524 millones obtenidos en el mismo periodo del ejercicio anterior.
Por su parte la moderación registrada en las últimas semanas por el precio del crudo ha empujado a la baja la tasa de inflación, que en agosto se redujo 4 décimas hasta el 4'9% lo que, según los expertos, podría suponer el comienzo de una senda descendente de los precios que se prolongará hasta final de año.

Esta es la segunda vez que los precios bajan en los últimos doce meses, ya que con anterioridad solo lo habían hecho en abril, cuando el Indice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) se situó en el 4'2 por ciento, tras reducirse otras cuatro décimas.

El ministro de Economía, Pedro Solbes, calificó este dato de «bueno» porque muestra una reducción «significativa» y dijo que éste ha sido el dato «positivo de la jornada». Solbes hizo estas declaraciones antes de su compa- recencia en el Congreso para explicar a los grupos parlamentarios la reforma del modelo de financiación.