Zapatero conversa con el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ayer en el Palacio de la Moncloa. Foto: EFE

TW
0

El jefe del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, aseguró ayer que en la Cumbre Iberoamericana celebrada la pasada semana «España dio una respuesta adecuada a una actitud inadecuada del presidente de Venezuela», y dijo que la sensatez pide ahora «recuperar el terreno perdido» y las buenas relaciones.

Durante la presentación del libro «Madera de Zapatero. Retrato de un presidente», del escritor gallego Suso de Toro, el jefe del Ejecutivo se refirió al incidente protagonizado por Hugo Chávez durante la Cumbre al arremeter contra el ex presidente José María Aznar, y a la reacción del Rey. A Don Juan Carlos, según señaló Zapatero, «lo que le hace saltar es ver que Chávez me interrumpía, que no dejaba que me explicara», y consideró que las palabras del Rey pretendían «darme un apoyo para que se pudiera escuchar la voz del presidente del Gobierno de España».

«El Rey tuvo un resorte de apoyo a que se le dejara hablar a España; si uno ve la escena, lo hizo de manera espontánea, y yo lo interpreté como una expresión profunda de lo que estaba sintiendo», insistió Zapatero, antes de subrayar que el monarca «borda» su papel institucional como Jefe de Estado. El presidente explicó que lo que se le pasó por la cabeza al oír las descalificaciones de Chávez fue que en otro foro similar como son las cumbres de la UE sería algo «absolutamente impensable» que los dirigentes políticos hicieran críticas a un ex presidente.