Cargos del PSOE mantuvieron ayer cinco minutos de silencio en memoria de los dos fallecidos en el atentado.

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El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el líder del PP, Mariano Rajoy, se reunieron ayer en el Palacio de la Moncloa para abordar la situación tras el atentado del pasado día 30 en Barajas con el que ETA rompió el alto el fuego permanente. Hora y cuarto de reunión en la que parece que las posturas no se han acercado en absoluto. Durante el encuentro, Zapatero ofreció a Rajoy un «diálogo permanente» para lograr la unidad de todos los partidos, pero el líder de la oposición dejó claro que no se moverá ni un milímetro del Pacto Antiterrorista suscrito por el PP y el PSOE en diciembre de 2000. Rajoy exigió al presidente del Gobierno que rectifique su política antiterrorista y regrese a ese pacto que, a su entender, ya está abierto al resto de fuerzas políticas, que son las que deben adaptarse al mismo.

Y también como sucedió en aquella ocasión, no fue Zapatero, sino la vicepresidenta, María Teresa Fernández de la Vega, la que compareció ante los medios para informar del encuentro. De la Vega afirmó que Rajoy hizo «oídos sordos» ante «esta nueva oferta de diálogo». «Será su responsabilidad si dice otra vez que no y hará un flaco favor a los intereses generales y a su propio partido», advirtió.