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OTR PRESS-SAN SEBASTIÀN
Batasuna asume que no podrá celebrar el acto previsto para este domingo, prohibido por el juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska. Y aunque todavía no adelantó una respuesta, sí acusó al PSOE, por boca de su coportavoz, Joseba Permach, de responder «con chantaje y sabotaje permanente a las expectativas de paz».

«Era impensable para cualquier ciudadano de Euskal Herria imaginarse hace 15 días que el Estado español, con el PSOE a la cabeza, iba a responder con el chantaje y sabotaje permanente a las expectativas de paz», afirmó Permach en una nueva rueda de prensa que Batasuna ofreció ayer en San Sebastián. Esa respuesta, dijo, ha sido, además del acto prohibido por Grande-Marlaska, el encarcelamiento de dirigentes abertzales, entre ellos Arnaldo Otegi, las «amenazas» de nuevas imputaciones a la Mesa Nacional y las fianzas «millonarias» que impuso a los encarcelados.

Desde el Gobierno se insiste en el mismo argumento: para hacer política hay que cumplir la Ley. Y el portavoz del PSOE en el Congreso, Alfredo Pérez Rubalcaba, dejó sentado ayer que la Ley de Partidos seguirá vigente porque sirve «de marco de referencia».

La formación ilegalizada todavía no se ha planteado cómo responder a la prohibición del acto. Permach aseguró que primero quiere ponerse en contacto con los partidos que se han mostrado en contra de la prohibición para «reflexionar conjuntamente sobre cómo dar una respuesta cualitativamente muy superior a la que hemos dado hasta el día de hoy».

El objetivo es garantizar «la participación política en las próximas semanas» de Batasuna y también que el partido ilegal pueda participar «cuanto antes» en una mesa de partidos. Y dijo que, en todo caso, ahora mismo no saben «si dentro de quince días estará toda la Mesa Nacional en la Audiencia Nacional».

Batasuna cuenta con el apoyo de los nacionalistas vascos. La portavoz del Ejecutivo que preside Juan José Ibarretxe, Miren Azkarate, aseguró ayer que «mientras siga en vigor la Ley (de Partidos) y el juez ordene a la Ertzaintza que debe hacer esto o debe prohibir lo otro, no hay salida». El Partido Comunista de las Tierras Vascas, por medio de un comunicado, aseguró ayer que los hechos de los últimos días «no han hecho sino confirmar y reforzar la estrategia ilegalizadora» y pidió al Gobierno la derogación «inmediata» de la Ley de Partidos».

Alfredo Pérez Rubalcaba sentenció que la Ley de Partidos «no se va a derogar» porque sirve de «marco de referencia» para el proceso que se ha iniciado con la tregua de ETA. «Los dirigentes de Batasuna tienen que pensar en Estado de Derecho y dejar de pensar en lo que pensaban», añadió.