No aclaró el presidente del Gobierno si existe ya un diálogo con
ETA y se limitó a decir que «la prudencia obliga» a no desvelar
cómo puede ser una hipotética negociación. Sí dijo que, si se
confirmara su esperanza de paz, «el Gobierno se tomará su tiempo
para dar un paso que, en todo caso, será en los términos que ha
aprobado el Parlamento». Y la actitud del PP, añadió, «no va a
perjudicar las expectativas de fin de la violencia».
El jefe del Ejecutivo aseguró que se basa en información que no
puede revelar por motivos de seguridad y que no comparte con el
principal partido de la oposición por la falta de confianza
reinante entre socialistas y populares.
«No se trata de optimismo ni de pesimismo. Es una convicción que
parte de una idea que sirve para la vida en general y para la
política y la convivencia en particular: se cosecha lo que se
cultiva», dijo Rodríguez Zapatero en su comparecencia tras el
Consejo de Ministros. Y lo que este Gobierno cultiva es «la
esperanza de acabar con la violencia».
Y es que Zapatero lanzó un duro alegato contra el PP, partido al
que exigió que sea más responsable. Dijo que «todos los gobiernos
que ha habido, todos, han contado con el apoyo leal, la
comprensión, la ayuda de la oposición en la lucha contra el
terrorismo», menos el suyo. «Es un deber por mi parte, como
presidente del Gobierno, hacer un llamamiento a la responsabilidad,
y si me lo permiten me siento con toda la autoridad moral, porque
yo también estuve en la oposición cuatro años y apoyé en todo al
Gobierno en la lucha contra el terrorismo», dijo.
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