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El Gobierno y las organizaciones agrarias UPA y COAG alcanzaron ayer un acuerdo sobre las ayudas para compensar la subida del gasóleo que incluye un aumento del IVA que perciben los agricultores y ganaderos por sus productos, la devolución del impuesto especial de hidrocarburos en 2007 y 2008, y el compromiso de avanzar en la creación de un gasóleo profesional en 2009. La patronal agraria Asaja, que abandonó las negociaciones, se beneficiará también del acuerdo al quedar establecida una norma nacional.

Por su parte, los secretarios generales de UPA y COAG, Lorenzo Ramos y Miguel López, respectivamente, coincidieron en calificar el acuerdo de «histórico» porque recoge su reivindicación de medidas estructurales para paliar la crisis de precios que atraviesa el campo y amortiguar con eficacia las oscilaciones de los carburantes.

Al término de la sexta reunión desde que se iniciaron las negociaciones a principios de noviembre, la ministra de Agricultura, Pesca y Alimentación, Elena Espinosa, aseguró que el acuerdo refleja la voluntad del Gobierno de ayudar al sector agrícola ante las dificultades que atraviesa por la subida de los carburantes, al tiempo que responde a las exigencias de la normativa comunitaria.

Concretamente, el acuerdo contempla la devolución del Impuesto Especial de Hidrocarburos a través de un estabilizador por el que se fije el precio del gasóleo a una media de unos 54 céntimos de euro por litro. Así, se devolverá cada céntimo que sobrepase ese precio hasta un límite de 7,87 céntimos, que es la cuantía actual del Impuesto Especial de Hidrocarburos.