Aznar intervino ayer en la clausura de la Convención Nacional del
PP, en la que se presentó el programa marco del partido para las
elecciones municipales y autonómicas del 25 de mayo. Aznar
consideró que no hay nada más necesario para una democracia sólida
que avanzar en la estabilidad y la permanencia de las leyes y las
instituciones, por lo que instó a perseverar en la «cultura
política de la estabilidad». En ese contexto realizó una firme
defensa de la Constitución y dijo que si ese texto ha permitido
satisfacer muchas aspiraciones del país, por qué hay que
replantearlo.
Tras lamentar la negativa al diálogo por parte del PSOE para
avanzar en una segunda descentralización, Aznar defendió los
objetivos del PP para los próximos comicios en torno a tres ejes:
más seguridad, menos impuestos y más calidad de vida. En su
desarrollo, José María Aznar describió cuatro prioridades: el
cuidado de los mayores, viviendas para los jóvenes, integración de
los inmigrantes y calidad de la educación.
«La Constitución es la solución, no el problema», aseguró el
presidente del Gobierno, quien insistió en que su estabilidad es la
garantía de que perduren los éxitos de España. En los 25 años de su
vigencia que se van a cumplir, Aznar dio por alcanzada la madurez
del estado autonómico prevista en él y dijo que ahora que hay que
mantener la vertebración y la cohesión del Estado.
Esa tarea cree que sólo pueden llevarla a cabo partidos sólidos,
ya que es difícil garantizar la cohesión de un país si no se puede
garantizar la interna propia, una cuestión en la que dijo que hay
«diferencias patentes» entre el PP y el PSOE. Aznar hizo hincapié
en que el PP es el partido del centro y que propugna «el realismo
frente a ensoñaciones, la responsabilidad frente a frivolidad, la
moderación frente al extremismo y la estabilidad frente a la
incertidumbre».
Aznar se refirió también a la situación en Galicia tras el
vertido del «Prestige», momento en el que elogió la entrega y
dedicación del presidente de la Xunta, Manuel Fraga, y destacó la
respuesta solidaria de España, pese a que algunos, en alusión al
PSOE, hayan pretendido sacar ventaja política de una desgracia.
Para Aznar, también ha pretendido dañar al confianza de los
ciudadanos en las instituciones, lo que aseguró que «no han
conseguido ni conseguirán como tampoco -dijo- han conseguido
hundirnos ni nos hundirán». Además, recordó que antes de fin de mes
el Gobierno aprobará el Plan de Reactivación Económica de esta
Comunidad porque «ahora -dijo- es el turno de Galicia».
El presidente de la Xunta, Manuel Fraga, aprovechó ayer su
intervención en la Convención para pedir a los nacionalistas que
respeten el consenso que todas las fuerzas políticas democráticas
alcanzaron durante La Transición española, y dejen de «desenterrar
muertos», pensar en «Estados libres asociados» y «volver a las
andadas» para «intentar romper la unidad nacional y el orden
civil».
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