El robo que se produjo hace menos de un mes en el chalet del marido
de la ministra Celia Villalobos y asesor del presidente del
Gobierno, Pedro Arriola, ha provocado que los partidos de la
oposición pidan explicaciones al Gobierno en el Congreso. Al
parecer, los ladrones sustrajeron del domicilio de Arriola una
serie de papeles, clasificadores, carpetas e informes
confidenciales de uno de los principales hombres de confianza de
Aznar con quien había preparado diferentes estrategias electorales
y posiblemente un informe sobre su sucesión. Arriola utilizaba este
chalet para reuniones de trabajo, no sólo con el presidente, sino
con clientes como Telefónica.
Los socialistas están bastante preocupados por si Arriola
pudiera guardar en su despacho privado documentos públicos,
reservados o confidenciales, habida cuenta de que el asesor del
presidente formó parte incluso de la delegación institucional que
negoció con ETA. El PSOE considera que el robo evidencia la
«lamentable política del Gobierno en materia de seguridad
ciudadana, fruto de la gestión del ex ministro del Interior, Jaime
Mayor Oreja, que redujo los medios de seguridad». Izquierda Unida
quiere que la situación se explique en el Congreso pues no entiende
que en un domicilio particular pueda guardarse información sensible
para el Estado.
El Gobierno, por su parte, ha confirmado el robo que se produjo
a mediados de septiembre y que fue denunciado. El hurto fue
fundamentalmente informático y de estudio y trabajo ordinario «que
no afectan a la Seguridad del Estado», según explicó ayer el
ministro de Interior, Angel Acebes. Los hechos se produjeron cuando
un grupo de desconocidos entró en el chalet de Arriola, situado en
el madrileño barrio de Chamartín. La Policía considera que los
ladrones son personas muy profesionales que llevaron a cabo un robo
«muy limpio» en el que no se produjo el hurto de objetos de
valor.
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