La manifestación registró momentos de gran tensión.

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Cuatro detenidos y varios heridos es el resultado de los incidentes ocurridos ayer tarde en Bilbao cuando la Ertzaintza impedía que prosiguiera la manifestación convocada con el lema «Gora (arriba) Euskal Herria» y a la que asistieron miles de personas "unas 50.000" , entre ellas varios dirigentes de Batasuna.

La Ertzaintza informó de la detención de cuatro personas, acusadas de desórdenes públicos. Sobre los heridos, fuentes de la DYA señalaron que los servicios de asistencia que esta asociación de ayuda tiene cerca del lugar de los incidentes habían atendido a veinte personas, 16 de las cuales fueron trasladadas a los hospitales de Cruces y Basurto, dos de ellas con lesiones de cierta importancia.

Los incidentes se produjeron cuando fuerzas antidisturbios de la Ertzaintza impedían la continuidad de la manifestación, a la que asistieron decenas de miles de ciudadanos, y cuando la marcha ya había cubierto con normalidad la mitad de su trayecto.

La cabeza de la manifestación partió sobre las 17:40 horas de la plaza Aita Donosti de Bilbao precedida por un enorme ikurriña. En cabeza de la manifestación caminaron también los dirigentes de Batasuna Arnaldo Otegi, Joseba Permach y Juan Antonio Urrutikoetexa; antiguos representantes de HB, como Jon Idigoras y Txomin Ziluaga; el secretario general de LAB, Rafa Díez y uno de los fundadores de ETA, Julen Madariaga.

La cabeza se fue abriendo paso entre decenas de miles de personas que desde tiempo antes ocupaban la calzada y las aceras de la calle Autonomía esperando el paso de la manifestación. Los asistentes dieron gritos a favor de la independencia y corearon el lema de «Euskal Herria Aurrera». La marcha discurrió con normalidad hasta las inmediaciones de la Plaza de Zabalburu, lugar donde agentes antidisturbios habían establecido un cordón para impedir su paso.

Tras unos momentos de gran tensión entre los integrantes de la cabeza de la manifestación y los agentes de la Ertzaintza, las abogadas Jone Goirizelaia y Arantza Zulueta traspasaron la línea policial para tratar de negociar una salida. Pocos minutos después, la tensión se desbordó y los agentes de la Ertzaintza realizaron una carga contra quienes se encontraban en la cabeza de la concentración, utilizando pelotas de goma y un camión de agua a presión.

Grupos de manifestantes respondieron lanzando botellas y piedras, que cogían de los contenedores cercanos, mientras que el grueso de marcha permanecía expectante a lo largo de toda la calle Autonomía.

La tensión derivó en nuevos enfrentamientos en los que la Ertzaintza volvió a utilizar material antidisturbios, mientras que los manifestantes lanzaban piedras, cruzaban sillas de terrazas y volcaban contenedores a los que prendieron fuego. Finalmente los alborotadores abandonaron el lugar sin que se produjeron más incidentes.