CiU se abstendrá en la reunión de la Diputación Permanente del
Congreso del próximo lunes que debe decidir la convocatoria del
pleno extraordinario para debatir la ilegalización de Batasuna por
considerar «inconveniente e innecesaria» la implicación del poder
legislativo en este debate. La federación nacionalista ha convocado
no obstante ese mismo día a la Comisión Ejecutiva Nacional, su
máximo órgano de gobierno, para decidir el voto definitivo en el
pleno extraordinario del Congreso previsto para el día 26 de agosto
para instar a la ilegalización de Batasuna.
El ministro de Administraciones Públicas, Javier Arenas, aseguró
que el Gobierno y los votantes no entenderían que CiU «se
abstuviera ante una votación que supone ilegalizar un partido
violento que ampara el terror», y añadió que «hay un abismo entre
nacionalismo y defender la independencia con armas». El secretario
general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, aseguró que no
entiende a «aquellos que dicen que Batasuna es un títere o
instrumento de ETA y no consideran conveniente su ilegalización»,
lo que calificó como de «contradicción intelectual difícilmente
asumible».
De otra parte, la Fiscalía de la Audiencia Nacional ha abierto
diligencias informativas para valorar si las manifestaciones de un
representante de Batasuna tras el acto de homenaje a la ikurriña
del jueves en San Sebastián y la quema de una bandera española
constituyen un delito de enaltecimiento del terrorismo. La Fiscalía
de este tribunal ha pedido a la Ertzaintza que presente un informe
en el que se identifique a las personas que participaron en estos
hechos.
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