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El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón ya prepara el embargo a Batasuna, tras el auto dictado el pasado miércoles en el que declara a la formación abertzale responsable solidaria de los actos de 'kale borroka'. Por ello, ha pedido a la Secretaría de Estado para la Seguridad del Ministerio del Interior que le informe si el Estado debe algún dinero a Batasuna. Lo que ya está claro es que Batasuna no pagará los 24 millones de euros que le reclama Garzón. Así lo dijo su portavoz, Arnaldo Otegi, que también advirtió que no permitirá su ilegalización, ni a través de este auto ni tampoco por medio de la Ley de Partidos.

Garzón quiere saber en qué estado se encuentra la deuda de 6 millones de euros que, según la Audiencia Nacional, se deben a HB por subvenciones electorales, de los comicios celebrados en 1982 y 1986. Según el auto de Garzón, el impago de los 24 millones de euros suponía el embargo de sus bienes, de todo tipo de subvenciones, de los créditos que pudieran concedérsele y de sus cuentas, por lo que esta cantidad podría ser requisada.

La decisión está ahora en manos del Tribunal Constitucional, aunque sólo sobre el impago de 204.344 euros. En caso de que el Alto Tribunal diese la razón a Batasuna, se podría aplicar el mismo criterio a otros recursos presentados por la formación abertzale, elevando la deuda a esos 6 millones de euros. El Gobierno considera que no debe pagar estas subvenciones, amparándose en la reforma legal aprobada por el Parlamento en diciembre de 2001, aunque la Audiencia Nacional la considera inconstitucional. A la espera de esta respuesta, Garzón también ha solicitado a la Unidad Central de Información de la Policía un informe sobre la descripción de los bienes de Batasuna que se podrían embargar. Dentro de ellos estarían también los sueldos de los diputados, concejales y empleados de la formación abertzale.

Lo que sí está claro es que Garzón procederá al embargo, toda vez que Batasuna ha anunciado que no pagará esos 24 millones de euros. Arnaldo Otegi dijo que la formación abertzale no puede hacer frente a una cifra «absolutamente desmedida» y si pudiera abonar la cantidad no lo haría. Batasuna todavía no ha decidido si recurrirá el auto de embargo, cuestión que todavía están estudiando los abogados de la formación abertzale, aunque este recurso, de producirse, no paralizará la ejecución del embargo.