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EFE/OTR-MADRID El Gobierno respondió ayer a los sindicatos que no tratará con ellos la reforma de la protección por desempleo porque está en el Parlamento, aunque sí les convocará para hablar de otros asuntos. Como era de prever, a los sindicatos no les ha gustado nada la misiva que consideran «despectiva» y han advertido al Ejecutivo que no descartan convocar nuevas huelgas generales estas legislatura.

La carta enviada hace unos días por los secretarios generales de estos dos sindicatos, José María Fidalgo y Cándido Méndez, al presidente del Gobierno, José María Aznar, en la que le pedían una entrevista tras la huelga general del 20-J tuvo ayer respuesta del jefe del Ejecutivo. En ella, Aznar recuerda que el Gobierno ha firmado más de una decena de acuerdos con los sindicatos, y que gracias en parte a ellos «el desempleo se ha reducido a la mitad», por lo que plantea «la necesidad de restablecer el diálogo social», para lograr el objetivo del pleno empleo.

En la carta, les anunciaba que el vicepresidente segundo, Rodrigo Rato, se pondría en contacto con ambos dirigentes sindicales para iniciar estas conversaciones sobre las reformas pendientes. La misiva de Rato llegó ayer mismo y en ella el vicepresidente les pide que atiendan «con interés» las convocatorias que en breve les harán llegar los ministros de Hacienda, de Trabajo y de Administraciones Públicas. En el ámbito de Hacienda, las conversaciones girarían, según Rato, en torno a los presupuestos generales del Estado y la ley de acompañamiento para el 2003 y la privatización de Trasmediterránea.