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El coordinador general de IU-EB, Javier Madrazo, consideró ayer «complicado» alcanzar un acuerdo con los nacionalistas antes de la investidura del lehendakari, aunque avanzó que su mano «sigue tendida» para lograrlo, mientras que PNV y EA atribuyeron el fracaso del proceso a los «problemas internos» de la coalición. Un día después de que la coalición liderada por Javier Madrazo diese por rotas las negociaciones con PNV y EA para su integración en el próximo Gobierno vasco, se han sucedido las declaraciones y explicaciones de los líderes de los distintos partidos implicados en las conversaciones.

El presidente del PNV, Xabier Arzalluz, consideró que las discrepancias presupuestarias alegadas por IU-EB son un «pretexto» porque, a su juicio, el detonante, más que «el reparto del poder», ha sido la existencia de «problemas internos» en esta coalición. Arzalluz afirmó que el coordinador general de EB/IU, Javier Madrazo, «quería entrar en el gobierno y tenía todo el apoyo de Llamazares y se han alegado razones presupuestarias, cuando ha sido por problemas internos», ya que «les gustaba» la parte de responsabilidad que para la coalición se había configurado. Así, para el dirigente nacionalista, «no es desvelar ningún secreto hablar de las dificultades internas de IU de Euskadi para formar parte de un gobierno. Los intentos de referéndum, lo que pasó en Alava, no es naturalmente algo que me incumbe a mí, sino parte de los problemas de un partido. Nosotros hemos puesto un empeño sincero en que formaran parte del gobierno», aseguró.

El coordinador general de IU-EB, Javier Madrazo, insistió en que la conclusión sin éxito del proceso ha estado motivada por los problemas «insalvables desde el punto de vista programático y presupuestario» en el área social. No obstante, indicó que su mano «sigue tendida» para llegar a un acuerdo de gobierno con PNV y EA, aunque consideró «complicado» que esta meta se pueda conseguir antes de la investidura de Ibarretxe como lehendakari de la VII Legislatura, el próximo día 11 de julio. En este sentido, anunció que, en caso de llegar a esta fecha sin resultados positivos, su formación «no podrá votar favorablemente a la investidura de Ibarretxe», si bien, según añadió, «las cosas pueden cambiar si existe voluntad».

Negó que las discrepancias dentro de su partido hayan forzado el fin de las negociaciones, al tiempo que destacó el «alto grado de sintonía» en materia de pacificación y normalización política que existe con PNV y EA y su voluntad de «trabajar conjuntamente» con ambos en este ámbito. Desde la dirección federal de IU, su coordinador general, Gaspar Llamazares, emplazó al lehendakari en funciones, Juan José Ibarretxe, y a los dirigentes de PNV y EA a «reflexionar» y les acusó de «haber impedido», con su actitud en las negociaciones, «la conformación de un gobierno plural, progresista y mestizo».