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SAN SEBASTIÀN. AGENCIAS. Un coche bomba ha estallado sobre las 8.15 horas de hoy en la calle Portuetxe, en el barrio de Igara, en San Sebastián, y ha provocado cuantiosos daños materiales, informó la Ertzaintza. La misma fuente indica que una llamada anónima alertó a la DYA a las 7:30 de la colocación del coche bomba y posteriormente, el periódico Gara también recibió un aviso. Efectivos policiales acordonaron la zona y sobre las ocho y cuarto de la mañana el coche estalló.

El vehículo estaba estacionado cerca de una sucursal del Banco Guipuzcoano, que ha quedado destrozada. Se da la circunstancia de que el rotativo El Diario Vasco está ubicado en la misma calle.

La Ertzaintza desalojó a una veintena de trabajadores del Banco Guipuzcoano minutos antes de la explosión. Según indicó un portavoz del Guipuzcoano, aunque la actividad de esta sede del banco comienza a las 8:00 de la mañana, alrededor de 20 de los 180 trabajadores que desarrollan su labor en las oficinas del camino de Portuetxe se encontraban en el interior del edificio desde las 7:50, momento en el que la Ertzaintza les informó de la existencia del coche bomba y les ordenó que abandonaran el edificio.

A las 7:30 horas, un comunicante anónimo avisó al diario «Gara» y a la DYA de Guipúzcoa de la colocación de un coche bomba, un Renault Clio de color blanco, en el camino Portuetxe, «frente al Banco Guipuzcoano», tras lo que se despidió con el grito en euskera «Viva Euskal Herria socialista», precisó la Policía Autónoma Vasca. En este edificio el banco dispone de «sistemas operativos» que, pese a la potencia de la explosión «están funcionando correctamente», precisó el portavoz de la entidad financiera.

El portavoz del banco consideró que los daños materiales provocados por la bomba «son más aparentes que reales», ya que han afectado a «cristales y placas de la fachada», pero no han incidido en el funcionamiento de los sistemas técnicos de la entidad. El inmueble del Guipuzcoano en Igara se encuentra vallado, por lo que desde el lugar donde estaba estacionado el coche bomba y la fachada del edifico «hay unos 20 metros», según el citado portavoz, quien consideró que «la valla ha amortiguado la explosión de manera importante».