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El presidente del Gobierno, José María Aznar, afirmó anoche, respecto al 'mal de las vacas locas', que, aunque la competencia corresponde a las comunidades autónomas, el Gobierno «asume su responsabilidad y no mira hacia otro lado». Asimismo, subrayó que no se trata de una epidemia, pero sí de un «problema muy serio» que afecta a todos los países que integran la UE pero a España en menor medida.

Respecto al uranio empobrecido, aseguró que no hay en ningún caso una relación causa-efecto con los cánceres en soldados que estuvieron en Kosovo y garantizó transparencia informativa sobre este asunto por parte del Ejecutivo. Recordó que este problema afecta a los países que han intervenido en Kosovo por parte de la Alianza Atlántica y subrayó que comprende «perfectamente» la inquietud de los familiares de los soldados españoles que prestaron servicio en ese territorio de la antigua Yugoslavia.

Respecto a la decisión del Supremo sobre Gómez de Liaño, Aznar aseguró que si, una vez que el Gobierno haya leído la resolución, considera que afecta a las prerrogativas del Ejecutivo, adoptará las iniciativas que considere oportunas. Rechazó entrar en polémicas, pero destacó que es el único caso de los 20.000 indultos de la democracia
De otra parte, Aznar anunció que en el año 2002 el Gobierno volverá a rebajar los impuestos, recordando que la rebaja de la pasada legislatura ya fue un éxito porque generó más empleo y crecimiento. Explicó que ahora en España hay un marco de estabilidad, y el ciudadano español tiene que pensar que la economía no va a sufrir las oscilaciones que tenía en el pasado, porque «hay un marco seguro de estabilidad», por la entrada de nuestro país en el euro.