TW
0

El presidente del PNV de Vizcaya, Iñigo Urkullu, consideró ayer una «traición histórica» la expulsión de su partido de la Internacional Democristiana (IDC), de la que era fundador, por no estar integrado en el Partido Popular Europeo.

Urkullu achacó el cambio en los estatutos de la IDC, que calificó de «subterfugio» por su aplicación retroactiva, a una «campaña de satanización y desprestigio internacional del PNV promovida por el Partido Popular con el argumento fácil de la colaboración y connivencia con el terrorismo».

En respuesta a su expulsión de la IDC, el PNV advirtió de que la actuación del PP ha puesto de relieve «su verdadera cara excluyente de derecha intolerante».

Para la ejecutiva del PNV, «se da la paradoja de que ahora es democristiano el ex ministro Manuel Fraga y se quiere sacar del pensamiento democristiano a uno de los fundadores de la Internacional, como es el Partido Nacionalista Vasco».

A juicio de este partido, lo sucedido en el plenario de la Internacional Demócrata Cristiana en Chile «es producto de una brutal campaña organizada por el Partido Popular español contra el PNV y que ha contado con el apoyo de varios partidos conservadores latinoamericanos», mientras que «los partidos históricos de la Internacional se han posicionado a favor del PNV».

El secretario general del PP, Javier Arenas, explicó que la expulsión del PNV de la Internacional Democristiana supone el rechazo a los nacionalismos excluyentes que no condenan el terrorismo y justifican a quienes lo apoyan.