La policía francesa detiene a cuatro miembros del aparato logístico de ETA

Turrillas, detenido en Anglet, sería un alto responsable de ETA, el de mayor rango de los cuatro. Pikabea y Santesteban fueron detenidos en Sare, tras haber intentado escapar de la policía, que los capturó a unos metros. Zabala y Santesteban son expertos en bombas dirigidas a distancia. Hubo otros tres detenidos, cuya identidad no se ha divulgado, en esta operación, que sigue abierta y que se produce al día siguiente de la detención en Bidart de «número uno» de ETA, Ignacio Gracia Arregui.

«Iñaki de Rentería» fue trasladado ayer a París, donde será interrogado hasta que pase a disposición judicial tras negarse a hablar en la comisaria central de Bayona. El «número uno» de ETA comparecerá probablemente ante la juez antiterrorista Laurence Le Vert, quien emitió una orden de arresto contra él después de su condena en rebeldía en 1997 a cinco años de cárcel.

De otra parte, el juez Garzón estima que los ediles de EH en Lezo (Guipúzcoa) y Berriozar (Navarra), Xavier Alegría y Jaime Iribarren, son dos de los máximos responsables del aparato político de ETA, EKIN, según el auto de prisión dictado contra ellos y otras 18 personas por pertenencia a banda armada.

Una característica de EKIN, «resultado de un largo proceso que se inicia con el 'desdoblamiento' de los distintos 'frentes' de ETA es que se sirve de la «doble militancia» de sus miembros, «comisarios políticos», para posibilitar su clandestinidad. Así, según Garzón, Iribarren y Alegria, quienes cumplen con los requisitos de esa «doble militancia», son dos de los responsables del denominado «núcleo nacional», junto a Juan María Mendizábal, y considera «responsable de EKIN» a Carlos Iñigo Blasco, detenido el 5 de marzo.