El PP acoge con decepción la decisión del PNV de no romper con Lizarra

El presidente del PP del País Vasco, Carlos Iturgaiz, consideró que «no ha cambiado absolutamente nada», porque «invalidar no significa romper» y lamentó que el EBB haya adoptado «una decisión contraria a la defendida por Anasagasti, que ha quedado en muy mal lugar y ha sido desautorizado». El portavoz del PSOE, Jesús Caldera, dijo que las declaraciones de Arzalluz «son favorables» para recomponer la unidad de los demócratas, aunque rechazó responsabilizar de igual forma al Gobierno y a ETA de la violencia en el País Vasco, como hizo Arzalluz. Para Caldera, con estas opiniones «estamos un poco mejor y la situación es más positiva, pero hay ambigüedad porque parte de las declaraciones de Arzalluz son inaceptables» como la vigencia de los principios de Estella.

El secretario de Desarrollo Autonómico del PSOE, Juan Fernando López Aguilar, opinó que las palabras del presidente del PNV suponen un «certificado de defunción» del pacto de Lizarra, por lo que pidió al Gobierno que recapacite para convocar la solicitada reunión con todos los grupos. Ambos dirigentes socialistas pidieron al Gobierno y al PP que no desoigan las palabras de Arzalluz y pidieron que se reúnan todas las fuerzas democráticas «en el foro idóneo, que es el Parlamento» ante la ofensiva de ETA. Para el también socialista Nicolás Redondo Terreros la comparecencia de Xabier Arzalluz fue «voluntariamente confusa, con mucha palabrería y poca sustancia». Redondo considera que mientras el PNV piense que siguen vigentes los principios de Estella eds imposible un diálogo inteligentes.