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El ponente y otros tres magistrados de la sentencia del Tribunal Constitucional (TC) por la que se excarceló a la antigua Mesa Nacional de HB cree que debía haberse reconocido a los condenados el derecho a la presunción de inocencia, aunque expresan su acuerdo con el fallo y su argumentación.

Además de este voto particular «concurrente» del vicepresidente Carles Viver y los magistrados Julio Diego González Campo, Tomás Vives y María Emilia Casas Baamonde, otros tres magistrados han presentado sendos votos «discrepantes», en los que expresan su disconformidad con la resolución del pleno Tribunal Constitucional que apreció que la condena a HB era desproporcionada.

Los tres votos discrepantes de la sentencia del Tribunal Constitucional suscritos por los magistrados Manuel Jiménez de Parga, Rafael Mendizabal y Vicente Conde, y que fueron dados a conocer ayer, consideran un «error» la resolución aprobada por la mayoría. Los magistrados manifiestan su disentimiento «radical» con el fallo, y Conde alerta que al declarar desproporcionada la pena impuesta por el Supremo se invaden competencias que corresponden a la «soberanía del legislador».

Asimismo, tanto este magistrado como Mendizabal destacan que es la primera vez que el TC entra a valorar la proporcionalidad de penas sin haber utilizado para ella una argumentación jurídica sólida, mientras que Jiménez de Parga se centra en desmontar que la pena fue desproporcionada.

Jiménez de Parga, que fue autor del primer borrador de la sentencia y que proponía desestimar los recursos, afirma en un voto particular de 91 folios, más extenso que la propia sentencia, que su discrepancia con la resolución del Constitucional es «radical».

En una primera parte, recuerda los argumentos de su ponencia, en los que rechazaba los once motivos del recurso de HB. A continuación, expresa su discrepancia con el argumento de la sentencia del Constitucional de que la pena prevista en el artículo 174.bis.a del antiguo Código Penal es desproporcionada, basándose en la propia doctrina del Tribunal, que entiende que no ha sido correctamente aplicada.