TW
0

El PP marcó ayer distancias con CiU y en la primera reunión que se ha celebrado en el Parlamento catalán tras los comicios del pasado domingo, se alió con la oposición para hacer perder dos votaciones al grupo que gobierna la Generalitat. El portavoz popular Daniel Sirera llegó a acusar al presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, de un delito de malversación de fondos públicos y pidió de forma implícita su dimisión.

La legislatura en la cámara catalana acaba como empezó, con la alianza conocida como «cuatro contra uno» y que hizo perder a CiU la presidencia del Parlament en favor del socialista Joan Reventós, gracias a un acuerdo del PSC, PP, ERC e IC.

Sin embargo, el pacto de nacionalistas y populares para la investidura de José María Aznar tuvo su reflejo en Cataluña y Jordi Pujol ha podido gobernar durante esta legislatura con normalidad y nunca le ha faltado el apoyo del PP en las cuestiones más importantes, como la aprobación de los presupuestos.

Esta alianza tácita, que a diferencia del pacto de gobernabilidad nunca se ha formalizado por escrito, quedó rota ayer después de los resultados adversos obtenidos por CiU y PP en las elecciones del domingo y que han llevado a las dos formaciones a replantear su estrategia y evitar la imagen de «connivencia» en Catalunya, aunque los nacionalistas mantendrán su apoyo al Gobierno. El diputado popular Simó Pujol se refirió a la voluntad de CiU de desmarcarse del PP y dijo que «nos sabría muy mal que a CiU le acusaran de connivencia con el PP, y para que no haya ninguna duda, votaremos a favor» de la propuesta de la oposición.

La primera derrota del grupo del gobierno se produjo durante la votación de una proposición no de ley de ERC de crear un marco legal específico que regule la publicidad institucional para frenar la «creciente y poco escrupulosa utilización de recursos públicos» por parte del ejecutivo que preside Pujol para «favorecer» a CiU, según el diputado republicano Joan Ridao.

La segunda votación que ha perdido CiU ha permitido aprobar una propuesta del PP que pide al gobierno de la Generalitat que no publique más discursos pronunciados por Pujol como líder de su formación.

Daniel Sirera, autor de esta proposición no de ley, acusó a la Generalitat de editar discursos partidistas de Pujol «con dinero de todos», y dijo que esta conducta «está perfectamente definida en el artículo 433 del Código Penal».

Este artículo se refiere al delito de malversación de fondos públicos y lo castiga con «pena de multa de seis a ocho meses y suspensión de cargo público por tiempo de seis meses a tres años».