María Pilar Rojo Hernández, una de las cuatro personas españolas
secuestradas en Colombia en los últimos días por la guerrilla, fue
liberada ayer, mientras que la Embajada española en Colombia
realiza gestiones para conseguir la liberación de las tres
restantes.
Rojo Hernández y su marido, residentes en Burgos, fueron
secuestrados por las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FARC), el
mismo grupo guerrillero que tiene en su poder desde el pasado
jueves a dos trabajadores españoles de la empresa Alcatel.
Todas las familias de los secuestrados han sido informadas por
el Ministerio de Asuntos Exteriores de la situación y a todas ellas
se les ha destacado la importancia de la discreción en estos casos,
por lo que se les ha desaconsejado que viajen a Colombia para
interesarse por los hechos.
Las fuentes citadas recordaron los buenos resultados que se
obtuvieron con esta política de «mucha discreción y poco
comentario» que se siguió con el secuestro de la cooperante Camino
Villanueva, lo que después agradeció la propia secuestrada y el
ministro de Asuntos Exteriores, Abel Matutes.
El matrimonio formado por Santiago Cabañas, de 46 años, y María
Pilar Rojo, de 36, se encontraba en Colombia para adoptar un niño
cuando fueron secuestrados el pasado domingo por las FARC.
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