Maria José Mora es su responsable de Formación. «Nuestra metodología se basa en aprender haciendo», dice. Recuerda que Esment Escola Professional fue pionera en la introducción del modelo de formación dual adaptada conectada con el empleo en Mallorca, pero también a nivel nacional. «Ahora también somos un referente a nivel europeo. Otras entidades sociales están aprendiendo de nuestro proyecto para poder implantarlo en sus países, por la eficacia que tiene de conectar las necesidades formativas con la realidad del mercado laboral», explica Mora.
Lo que comenzó como una urgencia, la de formar e insertar a personas con diversidad funcional, ha ido innovando y evolucionando hasta hacer extensiva su oferta a distintos colectivos. Hoy en día Esment forma también a jóvenes menores de 30 años y parados de larga duración. La clave de su éxito es la especialización en hostelería, una decisión que no se tomó al azar, sino desde la conciencia de la realidad del mercado laboral de Baleares.
«Formamos y cualificamos en hostelería para que se puedan incorporar jóvenes al mercado laboral. Igualmente formamos en el ámbito social. Tenemos una oferta formativa para cualificar a profesionales que luego se quieran incorporar a trabajar en nuestro sector», dice Maria José Mora.
La diversidad te hace especial
Miguel Ángel Binimelis es uno de los alumnos que está en el segundo curso de Formación Dual Adaptada, ya que tiene una discapacidad. «La formación dual es donde nosotros aprendemos a trabajar en un ambiente laboral. No solo aprendes sobre el bar, la cocina y el obrador, te adaptas a los entornos y a las personas con las que trabajarás en el futuro, eso hace que en el futuro estés preparado para adaptarte a la situación del entorno laboral sin ayuda de nadie»,dice.
«Cada alumno aquí tiene sus cualidades y sus diferencias, pero los profesores son muy majos y todos somos tratados de la misma manera. Nadie es igual a otro, la diversidad te hace especial, somos personas de todo tipo que aprendemos los mismos conceptos de la mejor manera», añade Binimelis.
Noel Torres es el coordinador del Servicio de Orientación de Esment. «Lo que nos diferencia es que somos un centro que impulsa la formación y la inserción en colaboración con las empresas. Contamos con casi 200 empresas aliadas. El 70 % son del sector de la hostelería para los que somos un referente (porque fuimos pioneros) a la hora de conseguir el personal cualificado que necesitan», dice.
Torres destaca la importancia de la coordinación entre el centro formativo y la empresa mediante la figura del tutor de empresa, que se designa en el centro. «Hacemos seguimiento tanto en la empresa como en la escuela. Realizamos un acompañamiento del alumnado, junto con el tutor, durante todo el proceso formativo. El 85 % de nuestros alumnos tiene éxito y consigue plaza en esa empresa aliada», resume.
El premio que el Consell ha concedido a la escuela se suma al que también ha recibido en esta misma convocatoria la presidenta de Esment, Montserrat Fuster, por su trayectoria personal.
2 comentarios
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JotaBueno, en formación o no, se come muy bien en sus restaurantes y eso es lo que debería valer. Además, como bien tú dices, están en formación. Y eso tienen un coste. Si tuvieran "pérdidas" (no solo se paga la comida, sino los docentes, centros, material, etc) esta iniciativa se hubiera extinguido hace tiempo Un saludo!
Yo aplaudo esta iniciativa, pero pienso que los precios que tienen al publico en la escuela de hosteleria, son bastante elevados teniendo en cuenta que el personal esta en proceso constante de formación. Se que es por una buena causa y acudo de tanto en tanto a la escuela.