La presidenta de Balears, Marga Prohens.

TW
16

Hoy domingo se cumpen 184 días desde que Marga Prohens juró su cargo como presidenta de la Comunitat Autònoma de Balears. Su partido, el PP, ganó claramente las elecciones de mayo de 2023 pero precisó del apoyo de Vox para ser elegida y formar Govern, el primero del PP desde 2011.

Jugar o no la carta de las elecciones anticipadas

La presidenta acostumbra a decir que no habrá sorpresas, que su propuesta para «el cambio» está muy detallada y que, desde que fue elegida, se han cumplido ya parte de los acuerdos que llevaba en su programa. No tiene que haber sorpresas pero puede haberlas. La presidenta tiene en su mano una carta: convocar elecciones anticipadas. Una carta que, según los plazos que marca el artículo 55 del Estatut, podrá jugar a partir de abril.

Consolidar y desarrollar las primeras medidas

Prohens ha expresado en diversas ocasiones cuáles son sus retos: los 500 puntos que llevaba el PP en el programa electoral y los 110 que cerró con Vox. El pasado 12 de diciembre, en una respuesta parlamentaria al portavoz de Més per Menorca, Josep Castells, detalló lo cumplido precisando, incluso, los días transcurridos desde que asumió la presidencia. Y así, por ejemplo, dijo que «a los 10 días» se eliminó el impuesto de sucesiones; que «a los 30 días» se recurrió la ley estatal de vivienda; que «a los 50 días» se aprobó la gratuidad de la etapa educativa entre cero y tres años y se aprobó un plan de fidelización del personal sanitario (se refería al decreto que suprimió el catalán como requisito); que «a los 60 días» se recuperaron las notas numéricas y aprobaron mejoras para el personal docente; que a «85 días» se aprobó el primer decreto de emergencia para la vivienda; que «a los 130 días» llegaron nuevas deducciones fiscales y que se habían tomado otras medidas que en unos días (eso iba a suceder el 21 de diciembre) se cuantificarían en los Presupuestos.

Preparar el plan piloto para elegir lengua

La presidenta balear, en aquella precisa relación, no se refirió a algo de lo que sí ha hecho bandera su socio de extremaderecha: un plan para la elección de la lengua en las escuelas que empezará a aplicarse con carácter experimental a partir de octubre de 2024. Es ya el próximo curso pero la Conselleria d’Educació tiene que tenerlo listo éste. Para ejecutarlo, las cuentas autonómicas, incluyen una partida de 20 millones de euros, lo que pedía Vox. El PP cedió a todo en la negociación de las cuentas públicas y el partido no lo oculta. El conseller Vera anunció el viernes una reestructuración de la Conselleria d’Educació pero la desvinvinculó del plan piloto sobre la lengua.

El desarme de las leyes de la época de la izquierda

Más allá de las primeras medidas del Govern de Prohens –algunas en la linea contraria a las del Ejecutivo anterior, sobre todo las contenidas en la reforma fiscal–, lo cierto es que se han dejado pasar los primeros meses sin cambiar o derogar ninguna ley de los 8 años anteriores, tampoco la de turismo. Eso empezará a cambiar cuando empiece en febrero el periodo parlamentario. Algunas iniciativas las promoverá directamente el Govern y otras vendrán de la mano de PP y Vox. Es el caso de la derogación de la Ley de Memoria Democrática. La Conselleria de Turisme está trabajando en la reforma de la ‘ley Negueruela’, la de «las camas elevables», aunque va más allá, y también hay que convertir el decreto de vivienda en ley. Una de las primeras leyes que derogó el Pacte fue la llamada «de símbolos», que definió a la era Bauzá. Y luego llegaron otras. Un diputado del PSIB ha comentado a este diario: «El Govern no tiene muy claro lo que quiere porque las medidas más importantes e impactantes se tienen que tomar al principio de la legislatura».

Mujer, igualdad, ayudas a ONG e inmigración

Esta opinión es compartida en Vox. De hecho, su grupo parlamentario utilizará la Cámara como «acelerador de propuestas». Después de una primera etapa centrada en lo que llama «libre elección de lengua», habrá medidas sobre inmigración, ayudas a ONG (ya suprimió una pequeña parte de las nominales que reciben los sindicatos) e igualdad, mujer e Institut de la Dona.

La ‘agenda estatal’ y oposición a Sánchez

Prohens no es Ayuso pero sí hará valer sus competencias autonómicas. Tiene una «agenda balear» que se sustancia en más financiación. Y, en coordinación con otras autonomías del PP, tiene que oponerse a Gobierno.