Una trabajadora faenando en una lavandería durante la pandemia. | Gemma Andreu

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Los trabajadores de las lavanderías de Baleares irán a la huelga indefinida a partir del 1 de agosto. Los sindicatos UGT y CCOO han decidido movilizar al sector después de que las negociaciones para las mejoras salariales hayan encallado. Un movimiento que puede resultar muy problemático para el sector hotelero, que en su gran mayoría tiene este sistema externalizado y que sufriría serias dificultades de logística en plena temporada turística y con la ocupación en máximos.

La propuesta de subida salarial realizada por la patronal, de 20 euros más hasta llegar a los 1.100 euros al mes, no ha satisfecho a los trabajadores, explican los sindicatos. «No es una oferta que esté a la altura de la precariedad con la que está trabajando toda esta gente», señala el secretario general de CCOO, José Luis García, para añadir que «la patronal ha de entender que los trabajadores y trabajadoras de este sector llevan mucho tiempo en esta situación de precariedad, tanto a nivel de condiciones laborales como de salarios».

Asimismo, García recalca que el último incremento salarial, hasta los 1.080 euros, «fue gracias a la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) por parte del Gobierno». La petición de los sindicatos pasa por una subida de hasta 1.300 euros más pluses y dos días libres a la semana, un punto, este último, que es calificado como una «línea roja» para las negociaciones.

La decisión de ir a la huelga puede tener efectos traumáticos para el sector hotelero en las Islas, ya que la gran mayoría de establecimientos en Mallorca y Menorca mantiene este servicio externalizado. La situación en Ibiza es diferente, con una mayoría de los hoteles con el servicio internalizado, por lo que el impacto sería menor.

Desde los sindicatos señalan que, en todo caso, los servicios mínimos que quedaran definidos a través de la Administración pública irían enfocados a servicios públicos esenciales como los sanitarios, de manera que los hospitales no quedarían desabastecidos.

Miguel Pardo, secretario general de CCOO Hábitat Baleares, advierte que los hoteles serían los primeros damnificados de esta huelga indefinida. «Va a afectar de lleno: no va a haber ropa, ni sábanas, ni toallas. Puede ser desastroso para el turismo».

El sector de las lavanderías aglutina a cerca de 1.500 trabajadores en todas las Islas. Muchos de esos empleados «están explotados», denuncia Pardo, «trabajando a destajo por el sueldo mínimo y con solo un día o día y medio libre a la semana». Las propias empresas, señala, tienen serios problemas para completar sus plantillas: «Con estas condiciones la gente se les está yendo».

Por lo pronto, todavía hay margen para la negociación: el próximo miércoles el comité de huelga y la patronal de lavanderías están convocados en el Tribunal d'Arbitratge i Mediació de les Illes Balears (TAMIB).

Además de las mejoras salariales y las libranzas, los trabajadores demandan regulaciones de las categorías y los ascensos, pluses de nocturnidad y la inclusión de tiempos de descanso y refrigerio en la jornada laboral de 30 minutos a cuenta de la empresa.