Jaime Far el día de la toma de posesión de la Oficina Anticorrupción. | Joan Torres

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A la espera de que se cierren los pactos entre PP y Vox, ya hay un asunto sobre el que las dos formaciones están de acuerdo: la supresión de la Oficina Anticorrupción. Fuentes de los dos partidos que participarán en las reuniones que se retoman esta semana señalan que en este aspecto no habrá ningún tipo de problema con la eliminación de este organismo ya que los dos lo consideran un gasto superfluo e innecesario.

Señalan que ya hay otros organismos que hacen el mismo trabajo que la Oficina y citan, en concreto, a la Fiscalía Anticorrupción y la Sindicatura de Comptes. Tanto el PP como Vox han anunciado en numerosas ocasiones que están en contra de esta institución y se opusieron en su momento a su aprobación. Consideran que se trata de un organismo político que han utilizado los partidos de izquierda con fines políticos, pero que no ha tenido ningún papel relevante ya que las denuncias que han llegado a la Oficina se pueden presentar de forma directa ante la Fiscalía.

Sin competencias

De hecho, los representantes de ambos partidos recuerdan que la Oficina no tiene potestad para realizar investigaciones penales, por lo que ella misma ha tenido que pedir a la Fiscalía que continúe las pesquisas dado que no tiene competencias para hacerlo. Por esta razón creen que es una mera correa de transición de las denuncias que terminan llegando a Fiscalía, que es quien sí tiene potestad para investigar.

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PP y Vox creen que el presupuesto de la Oficina se podrá destinar a asuntos que sí son necesarios y no a alimentar de personal una entidad sin competencias. El Govern ha destinado este año 1,4 millones de euros a la Oficina y su director, Cristòfol Milán, es uno de los cargos de la Comunitat Autónoma con una retribución más alta: cobra 99.853 euros, la misma cantidad que cobra el síndico Major de la Sindicatura de Comptes y muy por encima del sueldo de la presidenta de la Comunitat, que es de unos 73.311 euros.

La creación de la Oficina Anticorrupción fue una de las exigencias de Podemos para sustanciar el primer pacto genuinamente de izquierdas en Balears, en el año 2015. El PSIB nunca vio con buenos ojos la puesta en marcha de una entidad que también este partido consideraba innecesaria. De hecho, han sido abundantes las críticas lanzadas desde las filas socialistas contra el anterior responsable de la Oficina, Jaime Far, un nombre que fue una propuesta de Més.

Fuertes críticas del PSIB

El PSIB llegó a criticar con dureza a Far en el transcurso de una comisión en la que  compareció para explicar las deficiencias en la gestión que había detectado la Sindicatura de Comptes en su informe ordinario sobre la Oficina. En aquella comisión, tanto los representantes del PP como los de Vox anunciaron su intención de cerrar la entidad si llegaban al poder. Es lo que harán si finalmente se cierra un acuerdo de gobierno entre las dos formaciones, algo que ahora se están negociando.

Las claves
  1. Envío a Fiscalía una denuncia contra el presidente de Ibiza

    Una de las últimas actuaciones de la Oficina fue entregar a Fiscalía una denuncia del PSIB sobre el presidente del Consell de Ibiza por la contratación de una empresa. El presidente ha sido imputado por este caso.

  2. Falta de ética en la vacunación de varios altos cargos del Govern

    La Oficina investigó la vacunación adelantada de varios altos cargos del Govern y del Consell, pero todo quedó finalmente en un reproche ético y en el envío de las actuaciones a la comisión de ética pública del Govern.

  3. Un total de 61 casos investigados en el año 2022, casi todos resueltos

    Según la memoria de la Oficina del año 2022, en ese periodo se cerraron un total de 61 denuncias, la mayor parte de ellas archivadas. Además hubo otras 43 denuncias anónimas que no se aceptaron por falta de verosimilitud.