Sus compañeros aplauden su discurso. «Mr. D será el próximo presidente», comenta uno. «Tengo claro que cuando consiga los papeles, iré al Parlament a defender los derechos de los inmigrantes porque lo que viven en la venta son situaciones muy difíciles», responde el senegalés en un castellano casi perfecto.
Uno de los mayores problemas que tiene este colectivo es la problemática del idioma y la cultura para acudir desde el principio a las entidades locales y a la propia Administración: «Yo llevaba estos años sin saber más de dos palabras en castellano. Desde que estoy en el Patronat Obrer, mira ahora qué bien hablo», bromea.
Durante cinco años, Càritas Mallorca acompañó a los vendedores ambulantes para identificar cuántos eran, y aunque es un número difícil de cuantificar, pudieron detectar más de 200 personas.
Mr. D, llegó a Palma a las puertas de decretarse la pandemia. Por suerte, aquí le esperaba su hermano, con papeles en regla y con quien vive hasta la fecha. Si le preguntan por qué profesión busca, Mr. D menciona todas: «Me gusta trabajar de todo, en un hotel, en la construcción, en un bar, en un restaurante, lo que sea. Yo no quiero vender, no quiero vender más», lo dice alzando la voz con cierta rabia.
Como Mr. D, más de 50 personas en situación irregular y dedicadas a la venta ambulante se están formando en el programa T’acompanyo que acaban de impulsar la Conselleria d’Afers Socials y Fundació Patronat Obrer. Se espera que de aquí a final de mes sean 80 integrantes.
Khady Mbaye, de 28 años, es una de ellas. Llegó hace tres años a Mallorca desde Senegal y todavía no ha conseguido regular su situación para trabajar: «Me gustaría ser recepcionista de hotel, pero no puedo hacer nada sin los papeles». Lleva tres meses y medio en el programa y le enseñan no solo castellano, sino habilidades para integrarse, como sacar citas previas o acudir a la Administración para alguna cuestión burocrática. «Nuestro objetivo es encontrar un empleo y ayudar a nuestras familias. Porque queremos vivir, no sobrevivir», dice.
Una vez en el programa T’acompanyo, que tiene una duración de dos años, reciben una ayuda económica de 31 euros diarios como incentivo para que dejen la venta ilegal. La Conselleria destina para este programa 1,6 millones que cubre los dos años de formación y su ingreso mensual.
55 comentarios
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Cobrar por dejar de hacer algo ilegal, y los jovenes que no encuentran trabajo tienen que vivir a costa de sus padres.
Yo tampoco quiero ser pobre... Por eso trabajo, estoy de alta, no cobro ayudas y procuro llevar una vida acorde a mis ingresos. Regularicen sus situaciones y entonces podrán trabajar. Si no, barco
Si claro, Y yo quiero un chalet en son vida.
Si mañana me voy yo a vender a la playa del arenal, como española ¿ me incentivaran con 930 euros para que deje de hacerlo?
Pues perfecto. Os volvéis a vuestro país a exigir un trabajo digno, PERO NO A NOSOTROS, QUE NO TENEMOS NINGUNA CULPA.
900 al mes durante 2 años. Y sin cotizar un duro. Con sanidad gratis.. Claro las paguitas no existen... Somos una broma casi 2 millones de euros más pagar a los que trabajan en el chiringuito ..más sanidad
Gabriel Camps PonsPorque son posibles votos futuros
RebeldeNo sé si vd se ha paseado a veces por afers social ...nunca se entra en los criterios , nunca hay nada para su caso , las ayudas o no han llegado o se han terminado ...eso para los españoles y los mallorquines .
LectoraHay una clase mallorquina muy explotadora , muy racista hasta con los de otras comunidades autónomas que consideran inmigrantes encima.y que agruparon en guetos en los años 70. Hay que recordar que esos inmigrantes hicieron la riqueza en gran parte de las Baleares , también hay que recordar cómo los propios mallorquines acuden en masa para vender a precio de canario ,ya ni joven si no bébé, sus casas a esos mismos inmigrantes si son ricos o esos extranjeros que luego critican ! En fin hay que recordar cuántos mallorquines emigraron para vivir mejor en los 50 o 60 del siglo 20 y luego volvieron solo algunos . Así que tanto defender "lo nostro" de boca y tampoco en la realidad, salvo en defender un catalán que es en teoría un idioma conquistador ya que hay un balear mallorquín ibicenco menorquín que se tendría que haber defendido cuando se creó el estatuto de la autonomía y no rendir pleitesía a Catalunya , además de contribuir a que la gente lo hablé correctamente y lo sepa escribir que hoy en día todavía los hay que ni eso .
palmesanoMuy de acuerdo !