La inversión hotelera en reformas durante este invierno 2022-2023 supera los 190 millones euros, lo que supone un 34 % más respecto al ejercicio anterior. Todos los proyectos visados por el Colegio de Arquitectos de Baleares, de enero a octubre, están sujetos a las nuevas directrices que marca la ley turística que aprobó el Govern en febrero del pasado año. Las inversiones se realizan en la mayoría de las zonas hoteleras de Mallorca, destacando la Platja de Palma, Alcúdia-Can Picafort, Platja de Muro y Cala Millor, así como en las zonas turísticas de Calvià, caso de Santa Ponça.
La directora general de la Asociación de Constructores de Baleares, Sandra Verger, puntualiza: «El incremento de la inversión global en las Islas es de un 34 %, pero el dato que más resalta es la evolución en Mallorca, ya que los proyectos de reforma suman en su conjunto una inversión de 127,4 millones, que representa un 80 % más respecto a la temporada de 2021».
Verger añade que este indicador en Menorca «registra un aumento del 128 %, con 18,3 millones». En el lado contrario se encuentra Eivissa-Formentera, que registra un descenso del 29,5 %, con 44,5 millones de euros. La patronal de construcción ve todavía recorrido en este tipo de inversiones turísticas a lo largo de 2023. Verger puntualiza que el Colegio de Arquitectos de Balears «ha visado obra suficiente para mantener la actividad durante todo este año».
Añade que las subvenciones que se van a recibir con los fondos comunitarios Next Generation son muy variadas «y tienen al sector de la construcción como elemento tractor para hacer estas obras de rehabilitación y reforma que vienen subvencionadas por fondos europeos». Hasta la entrada en vigor de la nueva ley, la evolución de las obras de reformas de modernización o integrales de los establecimientos turísticos «había tenido un comportamiento muy positivo, como lo demuestra que en el período 2015-2018 el montante global de las inversiones superaran los 300 millones de euros anuales».
La directora general de la patronal de construcción explica que la pandemia «provocó un descenso, ya que el balance del año fue de 125 millones en el conjunto de todas las actuaciones». De cara a los próximos ejercicios, «una vez se acabe el efecto tirón de los proyectos visados y aprobados, la tendencia irá a la baja», afirma Verger. Los hoteleros y los touroperadores consideran vital para un destino vacacional tener una oferta de alojamiento moderna.
3 comentarios
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Hem de tomar hotels obsolets i els que impedeixen la regeneració dunar. En sobren molts, ja no troben ni empleats
A los hoteleros el año pasado o el anterior les dejaron hacer todo lo que querían, cómo no van a hacer obra? A los ricos, les dejan hacer de todo, solamente es a los demás, que nos tenemos que comer el marrón de no poder construir. Como siempre, la doble vara de medir.
La inversion de empresas privadas sigue siendo el motor autentico de la economia. Los hoteles de Mallorca están ya a un nivel impresionante. El entorno, sobre todo de infraestructuras, limpieza y seguridad, no acompaña.