El especialista en Endocrinología y Nutrición que ejerce en Son Espases y en la clínica Juaneda, Santiago Tofé, impartirá este martes una sesión informativa en la Reial Acadèmia de Medicina, sobre los últimos 20 años de cáncer de tiroides en Baleares.
Mucha gente no sabe ni qué es, ni para qué sirve, ni dónde su ubica la tiroides… ¿Qué importancia tiene?
— Es una glándula pequeña situada en la parte anterior del cuello. Su importancia es fundamental, ya que controla las funciones metabólicas de todo el organismo. La hormona tiroidea regula la capacidad de obtener energía a partir de los nutrientes. Con su ausencia, el metabolismo entra en ralentización y puede llegar a desembocar en una entrada en coma y la muerte.
¿Es habitual este tipo de cáncer?
— No es raro. En 2021 en España se diagnosticaron más de 3.000 casos, es la primera neocrasia del sistema endocrino y se sitúa entre los 5 o 10 tumores más frecuentes junto con al de vejiga o próstata. Es el más frecuente del sistema endocrino; de 10 a 15 personas de cada 100.000 lo van a desarrollar. Son cifras similares a otros países europeos.
¿Qué factores son de riesgo?
— Se sospecha de factores ambientales como la exposición a tóxicos o pesticidas, que actúan como disruptores hormonales. También la radiación ionizante, en los accidentes nucleares se ha visto una relación con el cáncer de tiroides. Puede influir el déficit de iodo, la exposición a los estrógenos o la obesidad, que es un factor de riesgo para otros tipos de tumores.
En su sesión científica repasa el impacto de esta patología en los últimos 20 años en Baleares.
— Presentamos un estudio en el que han participado muchos médicos, tanto en la recogida de datos como en el tratamiento. Se ha visto que la incidencia en Balears se ha ido incrementando; una parte importante se debe, como en otros países, a la incorporación paulatina de la ecografía cervical en la mayoría de consultas médicas. Como la patología nodular es prevalente se mira más y hay un sobrediagnóstico, ya que muchos tumores son de pequeño tamaño y nunca hubieran dado síntomas en la vida del paciente. Por otra parte también es cierto que, en menor medida, los de mayor tamaño o más agresivos también han crecido su incidencia. Por último hablaremos de la medicina de precisión con fármacos antitumorales y del mapeo genético. Además, Son Espases tiene una gran línea de investigación en la que es pionero por la que si el pronóstico de vida es excelente, se hace una vigilancia activa.
¿Sin operar?
— Se trata de no ser demasiado agresivos si sabemos que el comportamiento es bueno. La cirugía de cuello lo es y deja marcado al paciente que no tiene por qué someterse a cirugías de rescate quirúrgico si hay tratamientos menos agresivos e igual de eficaces. Por ahí va la medicina ahora.
¿Ante qué síntomas habría que alarmarse?
— Una voz ronca ya indica un paciente evolucionado, pero el principal síntoma que hay que reconocer es el bulto en la región anterior o lateral del cuello, por si es en un ganglio linfático. Ahí ya recomendamos que se vaya al médico de Atención Primaria.
¿Se ha avanzado en la investigación para el tratamiento de este tipo de tumor?
— Hay tres grandes líneas investigación: la de factores potencialmente asociados a la incidencia como es la epidemia de obesidad; exposición a estrógenos y agentes medioambientales potencialmente tóxicos; el desarrollo de técnicas mínimamente invasivas con menos riesgo que la cirugía de rescate o inicial y hacer el diagnóstico con mapeo genético para identificar el gen y tener fármacos específicos ya aprobados.
¿Se puede vivir sin tiroides?
— Se puede sobrevivir pero siempre con la alternativa del fármaco de la tiroxina; sus efectos reemplazan la producción de la hormona tiroidea.
Desde 2019, la cifra de personas con diabetes ha aumentado un 42 %. ¿Qué está pasando?
— Es cierto que se produce una verdadera pandemia porque se da la tormenta perfecta: un incremento de la obesidad y sedentarismo. Por otro lado, entre las clases socioeconómicas más desfavorecidas, la prevalencia es mayor porque la alimentación saludable es más inaccesible.
¿También sube en niños?
— Es importante vigilar a la población infantil porque los niños con sobrepeso de hoy son los adultos obesos con diabetes del mañana. En EEUU ya se ve (y aquí empezamos) una prevalencia in crescendo de diabetes de tipo 2 en niños y adolescentes, que es más habitual en la población de más de 55 años.
¿Qué está sucediendo con el fármaco para diabéticos que se promociona en Tik Tok como una forma rápida de adelgazar?
— La semaglutida tienen dos mecanismos, estimula la producción de insulina cuando suben los niveles de azúcar en sangre y modula el apetito. Su desarrollo clínico ha trascendido y es verdad que se ha popularizado pero es un fármaco y no está exento de potenciales efectos adversos. Se debe evitar la autoprescripción; una persona obesa siempre tendrá atención médica.
Investiga nuevos fármacos para tratar la diabetes, ¿qué camino se está tomando?
— Una de las líneas de investigación busca la estimulación del páncreas por la vía oral; tra intenta conseguir un páncreas artificial, se trata de poner una bomba de insulina que, a través de algoritmos, dé instrucciones de cómo funcionar. Es algo muy avanzado y podrá ser realidad. Para el diabético tipo 2, se abren puertas al tratamiento a través de la pérdida de peso y la normalización de secreción de insulina.
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