Imagen de la ceremonia. | Pilar Pellicer

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El obispo de Mallorca, Sebastià Taltavull, ha ordenado diáconos a tres seminaristas de la Diócesis este sábado en una ceremonia celebrada en la Catedral: Pere Antoni Amer, de 26 años, Joan Bausá, de 27, y Juan Peregrino Ndong, de 37 años. Los tres han finalizado la formación que les capacita para ser sacerdotes, si bien antes deben ser ordenados diáconos y ejercer este ministerio durante al menos seis meses, ha recordado el Obispado en un comunicado.

Pere Antoni Amer, de Pòrtol (Mallorca), entró en el Seminario de Mallorca hace 8 años y ha cursado los estudios de Filosofía y Teología. Actualmente está destinado en la Unidad Pastoral de la Costa de Calvià. Juan Peregrino Ndong Asumu Mikue es de Niefang (Guinea Ecuatorial), comenzó sus estudios en 2010 y, tras una interrupción, los reanudó en Madrid. Lleva 3 años en el Seminario de Mallorca y presta sus servicios en la Unidad Pastoral del Valle de Sóller. Joan Bausá Puigserver nació en Palma, estudió Filosofía en Pamplona y al regresar, entró hace 5 años en el Seminario de Mallorca. Está destinado en las parroquias de la Unidad Pastoral de la Virgen (Inca y alrededores).

La celebración presidida por Taltavull, con el decano de la Seu, Teodoro Suau y el párroco del Seminario, Francesc Vicens, como cocelebrantes, ha empezado con las promesas de los candidatos de ejercer con humildad y con amor el ministerio. Tras las letanías, con los candidatos postrados en el suelo, «símbolo de total disponibilidad», el obispo ha realizado la imposición de manos, tal y como hicieron los apóstoles, mientras pronunciaba la oración de ordenación. Los nuevos diáconos, ya revestidos con la estola y la dalmática, han recibido el libro de los Evangelios y han podido ejercer su ministerio en la liturgia eucarística asistiendo al Obispo, preparando el altar y distribuyendo la comunión entre los fieles asistentes a la celebración.

Durante su homilía, Taltavull ha dicho a los nuevos diáconos que «esta opción de vida tiene sentido cuando se hace del Evangelio la hoja de ruta para el andar de cada día» y debe ejercerse «con humildad y con amor». Ha expresado su voluntad de que, durante el diaconado que ejercerán unos meses, como paso previo al sacerdocio, «la oración, la reflexión y el estudio» les expliquen el sentido de las Escrituras.